Los desvíos en la A-92 provocados por las obras de la SE-40 se estrenaron ayer con un atasco considerable. La complejidad de las obras hizo que se retrasara la hora de apertura del nuevo itinerario que hay que seguir, lo que provocó hasta siete kilómetros de retenciones en dirección a Sevilla.
En el Centro de Gestión de Tráfico están convencidos de que poco a poco se irá recuperando la normalidad, pero lo cierto es que ayer el atasco alcanzó a las 8.30 de la mañana los siete kilómetros de longitud. La razón fue que los trabajos previos a la apertura del desvío (que en principio se iban a desarrollar entre las 20 horas del miércoles y las 8 horas de ayer) se alargaron más de lo previsto, con lo que éste no se abrió hasta las 9. A partir de ahí, todo fue como la seda.
Esto propició que el tráfico de entrada a Sevilla a primera hora se encontrara primero con la novedad del desvío, y segundo con que entre las 7 y las 8.30 horas sólo funcionó uno de los tres carriles habilitados. Después, durante media hora, ya entraron en servicio dos carriles, habilitándose los tres alrededor de las 9 de la mañana.
"La verdad es que ha dado sus problemas", reconocieron fuentes de Tráfico, y si el atasco no pasó a mayores fue porque estamos en pleno agosto y el tráfico es mucho menor que durante el resto del año. Por este punto pasan más de 20.000 vehículos al día. Los últimos trabajos previos a la apertura completa del desvío se hicieron ya sobre la marcha, como el asfaltado y el cambio del peralte de la curva, para darle más altura a una parte que a otra para aumentar la seguridad.
El tramo afectado está entre los puntos kilométricos 6,500 y 8,500, a la altura de la Venta la Liebre, aunque el desvío en sí no llega al kilómetro de longitud. Éste es como un tramo de autovía subterráneo (pasa por debajo de lo que será la calzada de la SE-40), con tres carriles y su correspondiente iluminación. Aunque no estaba previsto, ayer mismo se decidió que no se permitirá adelantar en el tramo de desvío. La intención es ver cómo se comporta el tráfico y, con estos datos en la mano, tomar una decisión definitiva sobre si se puede o no adelantar. La intención es que esté autorizado, aunque no se podrá circular a más de 60.
Inicialmente el tramo de la A-92 que se ha cortado es en dirección a Sevilla. El miércoles de la semana que viene, cuando los conductores estén más familiarizados con el desvío, se habilitará el del otro lado de la calzada, dirección Málaga y Granada, y se confía en que dará menos problemas.
Este desvío, que se prolongará durante un año, permitirá que las máquinas ocupen el tronco central de la A-92 para trabajar en el que será el principal de los 13 enlaces que tiene la SE-40. En principio, en ninguno de los otros habrá que realizar una obra de semejante calibre.
