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El fiscal no recurre la libertad vigilada a los menores condenados por agresión

La Fiscalía no recurrirá las condenas de entre seis meses y dos años de libertad vigilada impuestas a cuatro menores por la paliza propinada a otro joven en una botellona en la Plaza de España de Sevilla, mientras que la defensa del principal acusado solo recurrirá para bajar la indemnización.

el 16 sep 2009 / 01:16 h.

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La Fiscalía no recurrirá las condenas de entre seis meses y dos años de libertad vigilada impuestas a cuatro menores por la paliza propinada a otro joven en una botellona en la Plaza de España de Sevilla, mientras que la defensa del principal acusado solo recurrirá para bajar la indemnización.

Fuentes judiciales han informado a Efe de que la Fiscalía de Menores sevillana, que inicialmente pidió condenas de hasta cuatro años de reclusión en centro cerrado, ha decidido no recurrir la sentencia que impuso penas sensiblemente menores y absolvió, por falta de pruebas, a otros dos acusados.

Por su parte, la acusación particular que ejerció el joven agredido recurrirá la sentencia, que quedó muy lejos de los seis años de reclusión en centro cerrado que pidió en el juicio, al calificar los hechos como un homicidio en grado de tentativa.

En cuanto a la defensa, la letrada María Paz Malpica ha anunciado a Efe que únicamente va a recurrir la parte de la sentencia que se refiere a la indemnización de 62.819 euros que los tres condenados deberán abonar al lesionado.

Para ello, la defensa apelará a los informes médicos sobre las secuelas que la víctima sufre en el brazo, consecuencia del golpe con herida incisa que le causó una botella y que le han dejado con una inutilidad parcial para realizar actividades domésticas y practicar ciertos deportes.

Tres de los acusados, que pertenecen a familias estructuradas y conocidas de Sevilla, fueron condenados a dos años de libertad vigilada y otro a seis meses, en una sentencia que les aplicó la agravante de "evidente abuso de superioridad", pues "eran conscientes y se aprovecharon de ella" para "dejar en mayor indefensión a la víctima".

La agresión ocurrió en la madrugada del 12 de octubre de 2007, cuando se produjeron dos incidentes verbales en la glorieta de Covadonga de Sevilla, como consecuencia de los cuales la víctima M.A.S. pidió explicaciones a los ahora condenados.

La víctima, según la sentencia, fue golpeado por uno de los condenados y cayó al suelo, donde otros dos procesados le lanzaron botellas y una de ellas le impactó en el brazo, causándole una herida incisa por la que estuvo cuatro días hospitalizado y tardó en curar 256 días.

El joven se levantó y salió corriendo por la avenida Isabel la Católica, pero fue perseguido por "una multitud de personas", entre ellas tres de los condenados, uno de los cuales le puso la zancadilla y luego otras dos personas no identificadas, a bordo de una moto, le cortaron el paso y le golpearon con un casco para desestabilizarlo.

A continuación fue alcanzado y rodeado por diversas personas y por tres de los acusados, que de nuevo "continuaron pegándole patadas y puñetazos, sin que M.A.S. pudiera defenderse", y además sufrió cuatro botellazos en la cabeza que le causaron otras tantas heridas.

En el juicio declararon veinte jóvenes que se encontraban de botellona en la zona y la sentencia absolvió a dos de los procesados porque al menos cinco testigos les exculparon.

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