No se suspenderán sus hipotecas pero, al menos, los afectados por el terremoto que sacudió el lunes la región italiana de Los Abruzos podrán renegociar sus deudas con los bancos. Es una de las primeras medidas que toma el Gobierno de Berlusconi mientras las cifras hablan ya de 281 muertos y 1.500 heridos.
Lo que en un principio pareció anunciarse como una suspensión de las hipotecas para los afectados por la catástrofe del terremoto, finalmente queda definido como una "renegociación" de sus deudas con los bancos por el pago de unas casas que ahora están prácticamente destruidas. Esta es la iniciativa más destacada del paquete que aprobó ayer el Consejo de Ministros italiano para los 29.000 evacuados en una reunión extraordinaria en Roma y de la que, antes incluso de que ésta concluyera, se filtraron algunos detalles a los medios de comunicación.
"El terremoto ha quedado definido como causa de fuerza mayor que autoriza la renegociación de las hipotecas contraídas por la población con los institutos de crédito", rezaba el comunicado de prensa divulgado al término del Consejo de Ministros. Entre las medidas que contempla el Ejecutivo de Silvio Berlusconi figura además la indemnización de 800 euros mensuales a los titulares de actividades económicas comerciales, productivas, agrícolas o similares, así como una atribución de hasta 400 euros mensuales para las familias evacuadas. Como ya se anunció previamente se suspenderán las facturas de electricidad y de gas de los afectados, aunque el comunicado de prensa del Gobierno especifica que la suspensión es por dos meses, que podrán ser prorrogables si así se decide.
El número de muertos asciende a 293 tras recuperarse otros tres cadáver . Mientras, el número provisional de víctimas del terremoto que ha sacudido la región italiana de los Abruzos asciende a 293, tras recuperarse hoy los cuerpos de un joven de 17 años, de una mujer, posiblemente su madre, y de una anciana, informó Protección Civil. Los tres cadáveres fueron extraídos de entre los escombros de una casa del centro de L'Aquila, la capital de la región, la más afectada por el terremoto del lunes, que alcanzó los 5,8 grados en la escala de Richter.
El primero recuperado fue el de la anciana, a media mañana se extrajo el de la mujer, de unos 50 años, y a media tarde el del joven de 17. Los tres vivían en una casa de Vía XX de Septiembre, frente a la Casa del Estudiante, una especie de colegio mayor que se desplomó y en el que fallecieron varios estudiantes. En la casa vivían también dos hombres, uno de ellos marido y padre de la mujer y del joven hallados hoy, y un dentista. Los cadáveres de los dos adultos fueron recuperados el viernes.
Según pasan las horas, la esperanza de hallar personas con vida bajo los escombros se reduce, teniendo en cuenta además las bajas temperaturas registradas en la noche en L'Aquila, ciudad que se levanta en las faldas de los Apeninos, que aún están nevados.
Las labores de búsqueda continuarán en los próximos días, en los que está previsto que llueva, lo que dificultará más las tareas.
Mañana, Pascua de Resurrección, el presidente del Gobierno, Silvio Berlusconi, volverá a L'Aquila para pasar la jornada con los miles de damnificados del terremoto. Desde el pasado día 6, cuando se produjo el temblor, las réplicas registradas en los Abruzos han sido 1.096, de ellas tres con una magnitud superior a 5 grados en la escala de Richter y 9 con una magnitud superior a 4 grados.
