Local

El juguete del jeque

Que un multimillonario árabe compre el Betis parece una decisión estrictamente empresarial o sólo es un capricho del nuevo rico que no tiene nada que hacer los domingos por la tarde? ¿Puede un empresario foráneo -que nadie vea xenofobia- garantizar que al mismo tiempo...

el 16 sep 2009 / 00:21 h.

Que un multimillonario árabe compre el Betis parece una decisión estrictamente empresarial o sólo es un capricho del nuevo rico que no tiene nada que hacer los domingos por la tarde? ¿Puede un empresario foráneo -que nadie vea xenofobia- garantizar que al mismo tiempo defenderá la supervivencia de una institución centenaria, con la que muchas personas se identifican y vinculan de forma afectiva, con el lícito afán lucrativo o, por el contrario, este se impondrá frente a cualquier cuestión sentimental?

Si está aburrido, que se compre un submarino. Y si quieren convertir al Betis en una cosa que no es el Betis, o se lo llevan a otro sitio, o le cambian el verde y blanco o vaya Vd. a saber qué quieren hacer... Pues un consejo, adquirirá un bien por precio cierto y determinado, pero su valor no será igual pues éste siempre estará condicionado por lo que piensen, sientan y opinen los béticos. A ver si me entienden, el patrimonio intangible del Betis, incalculable por cierto, no tiene un propietario definido y nunca podrá ser monetizado. En esto, afortunadamente, las leyes del mercado no pueden prostituir la esencia del beticismo.

  • 1