El Hospital Virgen Macarena rediseña sus urgencias en plena temporada alta más de 500 pacientes son atendidos cada día y en medio del debate sobre el «colapso» del servicio detectado por los pacientes y denunciado por los sindicatos desde finales del pasado año.El centro ha culminado, de momento, la primera fase de la reorganización, que pasa por atender al paciente a través de un circuito que prioriza la gravedad de la patología con la que acude a las puertas del hospital y un refuerzo en una plantilla que, según los últimos datos, estaba compuesta por más de 300 profesionales. Es el primer paso dentro de un plan de rediseño de las urgencias que implicará más modificaciones, entre las que se incluye la reforma estructural de las urgencias, y que se culminará en el tercer trimestre del año.
La puesta en marcha de este circuito asistencial para reordenar las urgencias busca una doble función. En primer lugar, tratará de contrarrestar la carga asistencial que sufre el hospital y que, según consta en la última memoria del centro (2012), atendió a 209.299 personas, lo que equivale a una media de 572 pacientes al día a las puertas de la zona de urgencias.Esa media es superior incluso a la afluencia de usuarios de la temporada de frío, ya que se estima una atención que supera las 500 urgencias diarias.
Sin embargo, el nuevo plan para abordar las urgencias también forma parte de ese pulso que se mantiene con los sindicatos, que han denunciado varias veces la saturación del servicio. La última crítica llegó de CCOO, que cuestionó las trabas puestas a los sindicatos para acceder al área de Urgencias y «ocultarles el caos organizado por la sobrecarga de pacientes y la falta de camas» para atenderlos. El sindicato denunció, a través de un comunicado, que la dirección «decidió impedir el acceso del personal del hospital al área de Urgencias codificando las cerraduras de las puertas de acceso», a la par de recriminar «un recorte del 18%» de las camas. Por este motivo, solicitaron la ampliación de la plantilla en este área y así evitar lo que consideran «unas intolerables condiciones de trabajo».
La mejora, de momento, sí prevé refuerzos en la plantilla. En concreto, se espera la contratación de tres facultativos, seis enfermeros y seis auxiliares de enfermería «orientados a mejorar la asignación de profesionales en función de las necesidades reales de los pacientes». En esa ampliación también ha influido el Plan de Alta Frecuentación, que se activa cada año para atender el aumento de la demanda derivado del descenso de las temperaturas, la proliferación de las patologías invernales, como es el caso de la gripe, y el aumento de pacientes aquejados por patologías crónicas (cardiopatía isquémica, insuficiencia cardíaca, bronconeumopatías) y pacientes pluripatológicos. No obstante, la mejora no pasa exclusivamente con dotar de más personal. La idea pasa por la optimización del servicio. Una de las fórmulas escogidas tiene cierto aire a la remodelación que sufrieron las urgencias del Virgen del Rocío a finales de 2008, cuando se aplicó un sistema en el que se distribuía a los pacientes en función de la gravedad de su patología. Sin citar ese ejemplo, la dirección del Virgen Macarena sí mencionó «un circuito de atención» que combina «la mejora de la comodidad e intimidad de los usuarios asistidos en el área» con «priorizar y diferenciar el espacio destinado a la atención de los enfermos» partiendo de criterios de gravedad.
BOXES SEPARADOS
El nuevo organigrama señala que los pacientes con mayores necesidades de atención médica y cuidados enfermeros serán ubicados en un ámbito individualizado (boxes independientes), donde permanecerán acompañados de un familiar hasta completar su estudio diagnóstico, en espera de criterio médico sobre la necesidad o no de su hospitalización. Otro de los apartados que se contempla en el plan de rediseño es el ordenamiento de la circulación de profesionales y usuarios en el área de Urgencias. Así, se ha dispuesto un control automático de acceso por código numérico que sólo habilita al personal de Urgencias y profesionales que previamente soliciten la entrada. Un código que es, precisamente, el que ha puesto en solfa los sindicatos y que han puesto como ejemplo de «ocultación del caos» que se produce en el servicio en estos días de alta frecuentación. Sobre las visitas de familiares al área de observación, tendrán el mismo horario y permitirán el acceso al mismo número de familiares que antes de la reforma.
El hospital Macarena informó de que la atención sanitaria durante la época de frío se sitúa una media de 500 urgencias diarias, con un tiempo de atención tiempo de estancia en Urgencias desde que un usuario entra hasta que se le resuelve su motivo de consulta, bien para darle el alta o para ingresar en hospitalización que se sitúa en torno a tres horas y media, una media que sería la misma que el año pasado y que los sindicatos cuestionan, al matizar que se alcanzaron estos días picos de 20 horas de espera.
