Como todos los años por estas fechas, Sevilla se viste de diversos colores y los feriantes preparan sus atracciones para dar espectáculo entre los más jóvenes, y no tan jóvenes.
Este año viene cargado de ánimo y esperanza, pues los feriantes confían en el entusiasmo de años atrás. "A pesar de la crisis, los precios seguirán como los de todos los años", deja claro uno de los dueños, quien además apunta que estaría dispuesto a bajar el precio de su atracción en caso de que se viera obligado por la falta de asistencia a la misma.
Mientras este feriante opta por esta postura, otros como el montador de "El ratón vacilón" ofrece una visión distinta, y es que para él la crisis está muy presente. Se ha visto en la obligación de reducir la plantilla, así como disminuir el precio de los billetes de viaje en su espectáculo. Este es uno de los motivos por los cuales incita a la gente a venir y disfrutar de su atracción.
Queda ya poco para la inauguración de las instalaciones en el recinto ferial, y esto se va notando en el ambiente, la capacidad de motivación, el disfrute del momento?y es que pese al esfuerzo del trabajo tan grande que realizan, viven el día a día con mucha ilusión, actitud y ganas de cachondeo en todo momento. Así es como viven los preparativos en el Real todos los feriantes
