Economía

El Popular abre la veda al reajuste de oficinas y anuncia 300 cierres

El Banco Popular ha dado el pistoletazo de salida al proceso de reajustes de la red comercial al anunciar el cierre de 300 sucursales en dos años para reducir costes. Se convierte así en la primera entidad en materializar la recomendación del Banco de España de redimensionar la presencia del sector para afrontar la crisis.

el 16 sep 2009 / 01:58 h.

El Banco Popular ha dado el pistoletazo de salida al proceso de reajustes de la red comercial al anunciar el cierre de 300 sucursales en dos años para reducir costes. Se convierte así en la primera entidad en materializar la recomendación del Banco de España de redimensionar la presencia del sector para afrontar la crisis.

Al calor de los años de bonanza económica, las entidades financieras han protagonizado un espectacular proceso de expansión de su red comercial por toda la geografía española, con una estrategia basada, en el caso de las cajas de ahorros, en la implantación en comunidades foráneas. Pero ahora, con la crisis económica y financiera, el panorama ha cambiado y no sólo se replatean los proyectos de expansión, sino que buscan ahorrar costes.

Y el primero en dar ese paso ha sido el Banco Popular, que ya ha cerrado 70 oficinas en el primer trimestre de este año y prevé clausurar otras 80 de aquí a finales de año. Y hará lo mismo con otras 150 sucursales durante 2010, según precisó ayer su consejero delegado, Roberto Higuera. En total una previsión de 300 cierres que persiguen una contención de costes, una senda que, pronosticó, seguirán otras entidades.

Con esta decisión, el Popular materializa la recomendación expresada por el Banco de España de redimensionar la red comercial de las entidades para ajustarse a la actual crisis.

Según explicaron ayer fuentes del Popular, el cierre de oficinas "no afectará demasiado" a Andalucía, ya que en muchos de los casos las sucursales clausuradas corresponden a las filiales del grupo que fueron absorbidas por la matriz, un proceso del que únicamente el Banco de Andalucía quedó excluido. Así pues, aquellas que se encuentren muy próximas a las de Popular serán más susceptibles de cerrar.

Higuera presentó los resultados trimestrales del banco, que se anotó un beneficio neto de 224,76 millones, un 30,7% menos que un año antes, circunstancia que atribuyó a la política de aumentar las provisiones para hacer frente a la creciente alza de la morosidad.

Así, Banco Popular decidió realizar una dotación extraordinaria de 175 millones en el primer trimestre, que se suman al resto de provisiones, entre ellas, los 259 millones de dotaciones ordinarias.

La entidad registró en marzo una tasa de mora del 3,82%, casi cuatro veces más que el 0,98% del mismo periodo de 2008, con una cobertura para insolvencias del 133,4% para una cartera de créditos de 94.244 millones, que creció el 5,2%. El problema proviene de los promotores "en ajuste", más que de los particulares, reconoció.

El banco logró recuperar 900 millones de operaciones en morosidad en el primer trimestre, y cuenta con activos no estratégicos susceptibles para la venta por importe de 2.700 millones, de los que 2.000 corresponden al valor de la cartera inmobiliaria procedente de promociones, de la que "no tiene prisa" por desprenderse, ya que su coste de mantenimiento es barato gracias a los bajos tipos de interés. Según Higuera, el banco puede absorber bajadas de precio de inmuebles de hasta el 45%.

  • 1