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Cultura

El repaso. Se mueven las primeras fichas de la Feria

Nuestro crítico taurino analiza los pormenores de la actualidad taurina.

el 15 nov 2010 / 19:56 h.

* Por las rutas del toro. Los veedores de la empresa Pagés emplean el otoño en repasar el elenco ganadero que conocerán los abonados del coso sevillano cuando reciban la felicitación navideña de la empresa Pagés. Los resultados del pasado año -en lo negativo y lo positivo- marcan la primera guía para poder aventurar qué hierros estarán presentes o ausentes en la próxima Feria de Abril, aunque la experiencia indica que ciertas ganaderías estarán sí o sí.

Ya ha trascendido que la empresa ha decidido prescindir de Palha, que el pasado año protagonizó un petardo cósmico. Ese hueco, presuntamente torista, será cubierto con la vuelta de los atanasios de Dolores Aguirre, que ya ha confirmado que tiene toros para Sevilla al igual que Garcigrande, que retornaría. A esta baraja de ausentes se podría unir la de Zalduendo, un hierro en horas bajas que protagonizó uno de los escándalos ganaderos más sonoros de los últimos años. Lástima que entre los planes de la empresa Pagés no entren los hierros de Joselito -que cría el tipo de toro que menos le gustó en su época de matador- o Victoriano del Río, otra de las mejores vacadas del momento que, con su incomparecencia, reafirma también la de José Tomás.

* El caso Cuvillo. Ya le comentábamos algo la semana pasada: los Núñez del Cuvillo quieren volver a figurar en los carteles de Sevilla y se han apresurado a desvincular su presunta comparecencia en el coso del Baratillo de la improbable vuelta de José Tomás. En unas sabrosas declaraciones que podrán conocer detalladamente esta noche en el programa Con Torería de Giralda TV, el empresario Ramón Valencia deja las cosas claras después de quedarse el pasado año con un palmo de narices: "Si quieren venir, que llamen".

Como ya saben, Álvaro Núñez Benjumea condicionó la lidia de sus toros a la presencia del divino de Galapagar después de salvar una negociación por la que nadie daba un duro. Difícil se antoja el empeño, tan lejano como esa ansiada vuelta de Tomás, más compleja que la fusión del átomo. "Si se repiten las mismas circunstancias del pasado año no toreará". Pues eso.

* La liturgia manda. Desde que el ciclo taurino dio su último estirón, las semanas santas más tardías obligan a un reajuste de la programación taurina que, sin solución de continuidad, hila Pascua, preferia y farolillos en dos intensas semanas de toros. El ciclo comienza el Domingo de Resurrección y se cierra con los miuras del domingo de farolillos en una sucesión ininterrumpida de 16 festejos. Hablando en plata: la próxima Feria de Abril pierde el fin de semana de la preferia y cuenta con dos corridas menos -se mantendrá el primer espectáculo de rejones- para desplazar la novillada que usualmente abre el ciclo continuado a los domingos de la Pascua Florida. La empresa también baraja ampliar la feria de San Miguel con una de las corridas perdidas en abril.

* Quinielas pascuales. Fue el cartel gafado de la pasada feria de San Miguel; una combinación de toreros que resumía la excelencia de una notable Feria de Abril que dibujó el mapa de una temporada que ya es historia. El caso es que los nombres de El Juli, Manzanares y Morante de la Puebla se vuelven a barajar de cara a componer el lujoso cartel del Domingo de Resurrección, que el año que viene es el 24 de abril. Sólo queda pedir que la ganadería escogida y los toros reseñados para la ocasión estén a la altura de las circunstancias. Amén.

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