J. A.
La carrera mínima en las noches de los fines de semana a partir del próximo viernes será de 5,7 euros, un 50% más que en el ejercicio anterior. El nuevo suplemento, aprobado por Gobierno y el sector, incrementará 1,9 euros todos los servicios de taxi realizados entre las diez de la noche y las seis de la madrugada.
El incremento en las tarifas nocturnas es una medida requerida por el sector desde hace varios meses. Las dos asociaciones mayoritarias -Unión Sevillana y Solidaridad Hispalense- situaron esta demanda como una respuesta a las carencias del servicio nocturno en la ciudad. Eran pocos los titulares de licencias que consideraban que les compensaba salir a trabajar de noche, debido a los problemas de seguridad que surgían. La iniciativa trata de generar un incentivo, aunque repercute sensiblemente en el bolsillo de los consumidores precisamente el año en el que éstos soportan la mayor inflación de la última década.
La propuesta tiene dos partes.
Por un lado, el suplemento de 1,9 euros en todos los servicios, que entrará en vigor el próximo viernes, tras su publicación en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía de ayer. La carrera mínima nocturna, que antes se situaba en 3,74 euros -3,87 según las tarifas de 2008-, pasa los fines de semana a 5,7 euros. Por otro, la liberalización del calendario de descansos: desde la pasada semana los 2.200 taxis que conforman la flota podrán circular las noches de los fines de semana. Se suprimen los descansos obligatorios.
La medida es nueva en Sevilla, pero se trata de una propuesta basada en los modelos aplicados en otras capitales del país. En Barcelona -ciudad que se toma como referente en numerosas ocasiones- se cobra un suplemento de dos euros en las noches de los fines de semana desde enero de 2006. En Madrid, hay una cuota especial de 2,9 euros de noche. En otras grandes capitales, como Valencia, se puso en marcha otra fórmula para encarecer los servicios nocturnos: sólo se permiten carreras de más de cinco euros. En Zaragoza, cualquier servicio entre las diez de la noche y las seis de la madrugada cuesta un 50% más.
A partir de este fin de semana, el sector se enfrenta al reto de demostrar que este suplemento que recargará el precio conduce a una reducción de los problemas del servicio las noches de los fines de semana. Las dos asociaciones mayoritarias mantienen en su discurso que el principal problema sigue siendo la seguridad y que mientras esta situación no mejore, cualquier iniciativa reducirá las carencias, pero no cerrará definitivamente este frente. Planes como la instalación de mamparas - a través de una línea de subvenciones-, la constitución de una emisora de radio única o los sistemas de cobro con tarjeta de crédito siguen sin llegar a todo el sector y tienen una incidencia directa en el servicio nocturno.
