La sombra de la deflación planea sobre la economía andaluza, sobre todo después de que en abril los precios bajaran el 0,5% respecto al mismo mes de 2008. La región sitúa así su caída por encima de la media nacional, que quedó en el 0,2%. El transporte y el vestido fueron los que más se abarataron.
Los precios siguen la senda bajista en Andalucía y en España. El pasado mes cayeron un 0,5% en la comunidad, mientras que la media nacional lo hizo el 0,2% respecto a abril de 2008. En el caso andaluz, los principales culpables de este descenso fueron el transporte (-7,6%) -sobre todo después del desplome del precio de los combustibles- y el apartado de vestido y calzado (-1,8%). Los alimentos y bebidas no alcohólicas también se aliaron con los bolsillos de los consumidores el pasado mes, tras bajar el 0,3%.
Pero no fue Andalucía la región en la más bajó el IPC en abril en su tasa interanual. En Castilla-La Mancha los precios cayeron el 1,2%, mientras que en Castilla y León lo hicieron el 0,7% y en Galicia el 0,6%. En Cantabria y Murcia el comportamiento fue el mismo que en la comunidad andaluza (-0,5%). Al otro lado de la balanza, subió la inflación en Ceuta (0,7%), País Vasco (0,5%) y Cataluña (0,4%).
Sin embargo, la inflación sí aumentó una décima respecto a marzo en Andalucía, una circunstancia que se debe, fundamentalmente, al fin del periodo de rebajas. De hecho, el vestido y el calzado se encarecieron el 9,9%, lo que hizo crecer la media de la subida general. El mismo comportamiento tuvo el IPC en el resto del país, donde se incrementó el 1% en un mes.
Por su parte, la tasa de inflación subyacente (índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) mantuvo su tasa en el 1,3%, con los que sitúa su diferencia con el IPC en un punto y medio.
MÁS BARATOS. Hay sectores que han influido más que otros en el abaratamiento de los precios. La vivienda -donde se recoge todo el coste que genera el habitarla-, con una tasa anual positiva sólo del 1,6%, y los alimentos, con una caída del 0,1%, fueron los que más impacto tuvieron en la bajada de la inflación. En el primer caso se debe sobre todo a la reducción del precio del gas frente al alza que experimentó en abril de 2008.
En cualquier caso, hubo otro grupo de productos que sí subieron, como es el caso del ocio y la cultura (por el incremento del precio de viajes organizados en Semana Santa) y el transporte, que aunque cayó notablemente, lo hizo a menor ritmo que el mes anterior.
Lo que más bajó en un año fue el aceite, el transporte personal, el azúcar, la leche y los objetos recreativos.
