El pleno empleo y el bienestar social, la inversión en innovación y el fomento de la convivencia son los ejes sobre los que pivota el programa electoral del PSOE, en el que han colaborado más de mil expertos y que afronta el futuro "no como una amenaza, sino como una oportunidad".
Jesús Caldera, coordinador de este "más que programa electoral, proyecto" de Gobierno, presentó el borrador a la Ejecutiva Federal del PSOE, un documento de casi 200 páginas al que los miembros del partido aún tienen que presentar enmiendas, cambios o nuevas propuestas, antes de ser aprobado definitivamente en la Conferencia Política de los próximos 26 y 27 de enero.
El primero de los ejes sobre los que se articula el programa del PSOE es el pleno empleo, "el mejor cinturón de seguridad para la sociedad española". El objetivo es crear dos millones de nuevos puestos de trabajado, aumentando la tasa de actividad por encima del 70% (que será del 60% para las mujeres).
Política de familia. Tras destacar que sin una visión "optimista" no se podrá mejorar la economía, Caldera subrayó que el pleno empleo y la mejora del bienestar social "no son incompatibles". Por ello, en lo que es el segundo eje del programa, habrá ayudas a la familia, desde ayudas económicas directas hasta el incremento de las rentas (salarios y pensiones) más bajas. En este sentido, señaló que si hay margen para una nueva reducción fiscal se hará, aunque advirtió de que "hay muchas políticas que han de ser financiadas con impuestos". En todo caso, garantizó que si el PSOE gana no se subirá la presión fiscal.
Los socialistas también apuestan por seguir modernizando el país en materia de infraestructuras, educación o lucha contra el cambio climático.
El tercer gran eje, la convivencia, se centrará en buscar nuevos modelos para conciliar las distintas creencias, orígenes y costumbres que se dan entre los ciudadanos, ya que "todos merecen la adecuada y debida protección".
En materia antiterrorista, Caldera subrayó que los principios del programa "son exactamente los mismos" que los mantenidos esta legislatura: el "rechazo absoluto a la violencia" y la consideración de que el sistema democrático "jamás podrá ceder" ante ETA. "Además, no vemos margen alguno para procesos de diálogo" recalcó. En paralelo, el PSOE no da "por muerto" el Pacto Antiterrorista, y confía en que se produzca la "mayor unidad" de los demócratas ante ETA.
No más estatutos. Respecto al proyecto territorial, el PSOE sostiene que una vez que se reformen los Estatutos que están en marcha "el modelo de desarrollo está ya alcanzado, y no necesitaría en el futuro más reformas", y apostará por la cooperación entre las comunidades autónomas y el Estado para poner en marcha medidas como la ley de dependencia o las escuelas infantiles.
Una de las propuestas es crear un "observatorio" para garantizar la laicidad, la libertad de conciencia y de creencias, asunto en el que el propio Caldera discrepa, puesto que "no nos gusta hacer demasiados organismos", si bien señaló que el fondo sí es importante porque hay que garantizar "con firmeza" las diversas ideas y creencias. Asimismo, el PSOE defenderá la igualdad y la no discriminación tanto por razones de sexo como de origen o de confesión.
Caldera destacó que la redacción del borrador ha contado con la participación de más de mil personas, entre ellos expertos economistas o juristas, y subrayó que para el PSOE la pluralidad "es el mejor capital".
