Ha llegado más abajo que nadie: el arqueólogo municipal de Écija acaba de recoger la Medalla al Mérito Deportivo por su récord de profundidad.
-Usted acaba de recibir la Medalla al Mérito Deportivo (bronce). Eso le convierte en el primer espeleólogo vivo que la recibe. Debe sentir algo especial ¿no?
-Pues, fundamentalmente, que se hace un reconocimiento a la espeleología en general, que en España tiene un gran nivel, pero está bastante olvidada.
-Quizás sea porque es un deporte algo minoritario.
-En España hay aproximadamente 7.000 espeleólogos federados y 10.000 que la practican. Por tanto, minoritario sólo relativamente. En España somos uno de los colectivos mundialmente más numerosos.
-Y a usted le ha tocado esta medalla que le acredita como uno de los mejores.
-Pues sí. Pero insisto: a ver si a base de promocionar nuestra actividad se empieza a reconocer algo más este deporte en España.
-Por usted que no quede: tiene el récord de profundidad.
-Lo interesante de la espeleología es que no se trata de llegar. Lo más importante es buscar nuevas cuevas y explorarlas hasta llegar a la mayor profundidad.
-Lo ha hecho en siete ocasiones seguidas.
-Bueno, lo ha hecho mi equipo, que está formado fundamentalmente por ucranianos y rusos. Yo soy el único español.
-¿Y hasta dónde han llegado?
-Tenemos el récord de profundidad en menos 2.190 metros.
-Imagino que por lo que me cuenta no se quedará ahí.
-Bueno, nuestro próximo proyecto es viajar al Cáucaso a buscar nuevas cuevas y tratar de batir otra vez el récord de profundidad.
-Dice usted que el subsuelo es el único territorio inexplorado que queda en el planeta...
-Claro... es que hoy día hay medios para explorar la totalidad de la superficie terrestre, existen también los satélites... Sin embargo, las fosas oceánicas y las cuevas son los últimos territorios inexplorados que no hay forma de descubrir si no es por exploración directa.
-Directa y peligrosa.
-No porque, si te fijas, en espeleología como en alpinismo sólo es noticia la muerte o el accidente de un explorador. Y no es noticia que vaya todo bien. Nosotros somos conscientes del riesgo y vamos preparados. En más del 99% de los casos no hay problema que se presente que nosotros mismos no sepamos resolver por nuestros medios.
-¿Y cómo se forma y se prepara un espeleólogo?
-Con los clubes. Yo estoy federado desde que tenía 7 años y hasta 20 después no estaba a pleno rendimiento. Por eso me suena raro lo de la medalla "a un deportista revelación". (Risas).
-¿Se forman en clubes?
-Tradicionalmente sí, es así. Buscamos combinar exploración con formación y nos apuntamos a programas donde intercambiamos técnicas y experiencias en General.
-Después de 30 años y siete marcas, ¿muchas anécdotas?
-El primer récord lo batimos en un viaje de un día que duró tres semanas. Y en Abkhazia exploramos protegidos por la guerrilla.