Las noticias en Primera Provincial continúan emanando de la crisis económica. El último club en emitir una señal de socorro ha sido la UD Villaverde, sin la liquidez suficiente para cumplir con los compromisos de pago adquiridos. Rafael Rodríguez, el presidente de la entidad, había pactado el desembolso el próximo 20 de agosto de cuatro de las cinco mensualidades adeudadas al último entrenador del once albiazul, Moisés Gómez. Sin embargo, el acuerdo se ha suspendido y el preparador reclama el pago íntegro de las cinco nóminas y un plus en concepto de dietas ante, a su juicio, la ausencia de garantías de cobro. El club, que ha aprobado un presupuesto de unos 40.000 euros, sólo dispone del dinero de cuatro mensualidades, ya que la última y las dietas habían sido establecidas en un fijo prorrateado durante la temporada.