Deportes

En la tarea de encontrar el gol que se ha perdido

Dos jornadas no dan para elevar a teoría consolidada ninguna tendencia ni referencia estadística. Pero el problema con el gol de los delanteros del Betis no es nuevo. Llega el derbi y el conjunto verdiblanco necesita reencontrarse con el gol pero ya.

el 15 sep 2009 / 11:49 h.

Dos jornadas no dan para elevar a teoría consolidada ninguna tendencia ni referencia estadística. Pero el problema con el gol de los delanteros del Betis no es nuevo. Llega el derbi y el conjunto verdiblanco necesita reencontrarse con el gol pero ya.

En la clasificación del campeonato nacional de Liga aparece en un importate apartado un cero como una catedral en el casillero de dos equipos, el Real Betis y el Málaga CF. Ninguno de estos equipos andaluces ha sido capaz de marcar en lo que llevamos de Liga, los únicos, y lógicamente lo pagan con una clasificación muy mejorable.

En el conjunto costasoleño le toca a Antonio Tapia arreglar el asunto, si es que tiene arreglo, y a los medios costasoleños reflexionar sobre ello. Nosotros nos centramos en el problemón que tiene por delante Paco Chaparro, si los delanteros que tiene en nómima siguen la tendencia que apuntan desde hace meses, y en puertas de recibir a un eterno rival cuyo punto fuerte es el gol, aunque es evidente que mantiene los problemas defensivos de todo el año pasado.

El último gol en Liga del Betis lo hizo un defensa, Nano, el año pasado en Getafe precisamente. Ahora todos esperan a Edu, de hecho fue el máximo realizador el año pasado con 12 goles. De por medio hay una cuestión médica, porque los plazos para la recuperación del italo-brasileño andan demasiado ajustados. Si desde el punto de vista clínico tiene el alta para el domingo, no será fácil que incluso con su calidad pueda superar el mes largo de ausencia que sobre todo a comienzos de temporada provoca que el jugador lesionado carezca del ritmo adecuado para la competición.

Pero si repasamos los números de Edu del año pasado tenemos necesariamente que reparar en que acumuló más del 75% de sus goles desde la jornada 16 a las 26, y desde entonces sólo hizo dos goles, y en un mismo partido, ni más ni menos que para la inolvidable remontada ante el Barcelona (3-2) en la jornada 30. Las lesiones no le han dejado levantar cabeza desde entonces.

El testigo de Edu lo recogió Mark González, en realidad, cifras en la mano, el potencial goleador que tiene el Betis en estos momentos en sus filas, pese a jugar de extremo. El chileno, pese a la irregularidad de la campaña pasada, hizo seis goles, todos ellos en el tramo final del campeonato (cinco de ellos en los últimos 10 partidos, una media considerable). Por lo que vimos el domingo en Getafe, Mark continúa en esa línea de peligrosidad, porque cierto es que no hizo gol, pero estuvo cerca en alguna ocasión.

El delantero más delantero que tiene el Betis, Mariano Pavone, anda inmerso en esa racha que tienen de vez en cuando los delanteros, que ven la portería chica, como él mismo llegó a explicar cuando comenzó la temporada del año pasado sin ver puerta. En Getafe tuvo ocasiones que debió meter, pero su problema viene ya de lejos, en concreto desde que hizo el tercero de los goles del Betis en Zaragoza en abril de 2007, en el día que Mark hizo dos y se salió literalmente con un fútbol pleno de velocidad y desborde. Allí estaba el ahora bético Sergio García para certificarlo como testigo de excepción.

Pero para crisis la del sevillano José Mari Romero. Hay que tener muy buena memoria, o acudir a la ayuda de los buscadores de la red, para encontrar el último gol en Liga de este niño-prodigio que ha 'envejecido' mucho antes de lo esperado. José Mari no ha hecho ningún gol en Liga con el Betis, y comienza su segundo año.

Pero es que en la campaña 2006-07, todavía en el Villarreal, tampoco hizo ningún tanto en 19 partidos de Liga que tuvo la ocasión de disputar. En Getafe tuvo sus minutos, y tuvo en su cabeza la ocasión de romper un maleficio que se eterniza, pero la mano de Jacobo lo evitó. Se pudo ver cómo se lamentaba el jugador, que mejor que nadie sabe que no marca desde hace una eternidad.

Y si los veteranos, como ya hemos explicado, arrastran esa alarmante falta de puntería que se ha reproducido en el comienzo de este titubeante comienzo de Liga, en el caso de los fichajes, de esos hombres que también tienen su responsabilidad con el gol, pues se podría esperar algo más. Aunque no es un goleador nato desde que es profesional (en los escalafones inferiores del Barcelona lo fue y mucho), Sergio García tiene calidad de sobra para romper con la sequía.

El año pasado, en el Zaragoza, hizo seis tantos en total, tres en los primeros nueve partidos del Campeonato (uno de ellos al Sevilla) y los otros tres cuando el Zaragoza ya tenía la soga del descenso muy apretada. Otro futbolista que tiene y debe ayudar, sobre todo si juega algo más adelantado, en esta suerte suprema del gol, es el camerunés Achille Emaná, que en Francia, en su Toulouse, hizo el año pasado siete tantos en Liga perfectamente repartidos a lo largo de la temporada.

  • 1