El defensa francés del Sevilla Julién Escudé ha calificado hoy de "complicado" el partido del próximo domingo ante el Villarreal, que se disputará en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán.
El internacional galo ha augurado un encuentro "complicado" pero sólo en lo futbolístico, ya que ha asegurado que "están olvidados" los incidentes que ambos conjuntos protagonizaron en la pasada edición del Trofeo Carranza, en Cádiz, cuando los jugadores de Sevilla y Villarreal tuvieron una trifulca en el túnel de vestuarios tras acabar un partido bronco.
En conferencia de prensa, Escudé ha justificado a la afición sevillista que "apoya siempre, pero quiere más y es normal porque el equipo, también", por lo que asume que "con un empate o una derrota nadie está contento, ni los aficionados ni los jugadores".
Escudé, por otra parte, ha declarado que él personalmente se siente "muy bien" cuando juega en el Sánchez Pizjuán, donde el Sevilla este año ha sumado menos puntos que fuera, y ha pedido a los hinchas que "animen mucho el domingo contra el Villarreal porque es un partido muy importante".
El zaguero ha admitido que "siempre se pueden buscar cosas por mejorar, como manejar mejor los partidos, con menos prisa y más concentración", si bien ha recordado que pese a "los lesionados que ha habido, el Sevilla va cuarto en la Liga" y sigue "vivo en UEFA y en la Copa del Rey".
Por último, el defensa central ha asegurado sentirse "muy cómodo" formando pareja con su compatriota Sébastien Squillaci, de quien ha dicho que tiene "cualidades parecidas a las de Javi Navarro".
