La economía española continuó en recesión en los últimos tres meses de 2009, al registrar una caída del 0,1% respecto al anterior trimestre, según el Banco de España, que calculó que en el conjunto del año pasado el Producto Interior Bruto (PIB) retrocedió el 3,6%.
El organismo supervisor, que señala que en términos interanuales el deterioro del cuarto trimestre fue del 3,1%, y el del empleo del 6,1%, apuntó que en ese periodo la caída de la demanda interna -consumo e inversión- fue menos pronunciada (del 4,8%) gracias a algunas de las medidas de estímulo económico que, recordó, son transitorias.
Con el dato de octubre a diciembre, la economía española acumula siete trimestres de caídas consecutivas y cinco de retrocesos interanuales, mientras que el deterioro del conjunto de 2009 es el mayor de las últimas décadas. Una caída que, admite el Banco de España, no sólo se ha producido en consonancia con la recesión mundial, sino también por los "desequilibrios acumulados durante la fase expansiva".
En su último boletín económico, apuntó que el consumo de los hogares podría haber registrado ya un "ligero" crecimiento trimestral empujado sobre todo por las compras de automóviles.
No obstante, el consumo privado sigue siendo muy débil por el deterioro del empleo y las restricciones de crédito, que hace que el ahorro siga aumentando.
El organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez recordó además que la compra de coches puede estar reflejando una anticipación en las decisiones de gasto para los bienes duraderos, que se volvería a retraer así en próximos trimestres.
Por otro lado, consideró que la propuesta del Gobierno de elevar la edad de jubilación de los 65 años a los 67 puede contribuir de manera "significativa" al equilibrio financiero del sistema público de pensiones. El organismo regulador reiteró en este sentido la necesidad de que se acometan reformas estructurales para superar la crisis.
Al respecto, estimó de "especial transcendencia" las referidas a la sostenibilidad del sistema de pensiones.
Precisó que, aunque las propuestas de reforma del Gobierno están pendientes de concretar en un futuro muy inmediato, son, junto a la consolidación presupuestaria, el "principal instrumento" para recuperar la actividad y crear puestos de trabajo.
