Al menos nueve civiles iraquíes murieron por disparos procedentes de un helicóptero estadounidense cerca de la ciudad de Iskandiriya, 50 kilómetros al sur de Bagdad, según confirmaron fuentes militares de EEUU. El mando militar de las tropas invasoras reconoció en un comunicado que la muerte de esas personas, el pasado sábado, fue "un error".
Entre los muertos en la aldea de Tel al Asmar, cercana a Iskandariya, hay cuatro que pertenecen a la misma familia, incluidas dos mujeres, Fatima Rabie y Abir Rabie. Las dos mujeres fueron identificadas como parientes de Mohamed al Ghariri, un cabecilla de un Consejo de Salvación, milicias suníes que ayudan a los estadounidenses a combatir contra el grupo terrorista Al Qaeda.
Robo de petróleo. Irak ha pedido a Irán que detenga "de inmediato" la extracción de petróleo iraquí y que deje de "violar" sus campos petrolíferos, refiriéndose a los pozos que se encuentran en la frontera entre ambos países y que suelen ser motivo de disputa. Una delegación iraquí viajará próximamente a Irán para tratar este y otros asuntos.
