El presidente Evo Morales y sus opositores autonomistas concluyeron el domingo el llamado "diálogo nacional" sin haber logrado acuerdos sobre la crisis del país, tras 18 días de negociaciones bajo la observación de organismos internacionales.
Los gobernadores de Santa Cruz, Tarija, Beni y Chuquisaca dieron por culminado el proceso tras negarse a firmar un documento propuesto por Morales para hacer viable la convocatoria del referendo constitucional y aprobar los avances conseguidos en las mesas técnicas. A pesar del fracaso, los gobernadores opositores se mostraron satisfechos de que al menos esta etapa de negociación haya servido para pacificar la situación del país.
No obstante, el Gobierno de Morales intentará ahora en el Congreso Nacional conseguir los consensos necesarios para que se apruebe la ley de convocatoria de la consulta constitucional. Ayer se conoció que el Gobierno modificará en el Congreso 30 artículos referidos a las autonomías de su proyecto de Constitución.
El nuevo sistema de descentralización política dispondrá de tres niveles de autonomía: departamental, municipal e indígena, cada uno con competencias legislativas. Además, el viceministro de Coordinación con los Movimientos Sociales, Sacha Llorenti, declaró que "antes del referéndum" se van a incorporar al proyecto constitucional "las mejoras conseguidas en el diálogo".
