Los promotores y contratistas andaluces lanzaron ayer una señal de alarma por la deuda que tiene pendiente la Junta con el sector. Así, el presidente de la patronal regional de la construcción Fadeco, Federico Muela, denunció que la Administración regional debe a las empresas del sector "algo más de 850 millones de euros". "La situación no es que sea grave, es que es gravísima", aseveró, al tiempo que señaló que la deuda contraída comenzó a gestarse el pasado mes de agosto, cuando comenzaron los impagos.
"La crisis inmobiliaria fue anterior a la del sector de la construcción, porque éste tenía obras contratadas que le permitieron aguantar, aunque el problema ha llegado en agosto, cuando dejamos de cobrar las certificaciones de obra, algo que es insostenible", explicó. Muela destacó que este asunto afecta a empresas de todo tipo, aunque especialmente a las pymes, "que no tienen acceso al crédito y que necesitan que se les pague con inmediatez para seguir subsistiendo porque, a este ritmo, el sector se va a venir abajo como un castillo de naipes".
Así, explicó que, a cierre de febrero, la deuda asciende a 750,1 millones, a los que hay que sumar "unos dos millones diarios que la Junta invierte", de ahí que la deuda total sume "cerca de los 850 millones de euros". Lógicamente, la Consejería con mayor deuda pendiente es la de Obras Públicas y Vivienda, con más de 400 millones, seguida de la de Medio Ambiente, con 142. Muela relató que ha mantenido reuniones con Hacienda, "que está estudiando el problema, aunque no nos llega la respuesta". Así, denunció que la Administración regional no certifica la deuda "para no asumirla", aunque reconoció que no se trata de "falta de voluntad", sino de "que no tienen posibilidad e incluso parece que no se sientan porque les da vergüenza".
En cualquier caso, Muela aseguró que Andalucía "no es de las peores comunidades españolas en cuanto a deuda reconocida".
También señaló la caída en picado de la licitación de obra pública en los últimos años, que bajó en los dos primeros meses de este año un 24,8% la de la Junta, un 28,5% la de la administración del Estado mientras que ha crecido un 20,1% la de las administraciones locales.
Por otro lado, Fadeco también abordó la situación del sector inmobiliario. En este sentido, advirtió de que el Plan Concertado de Vivienda y Suelo ha sido "un fracaso" porque "no se hacen viviendas de ningún tipo". Ante esta situación, exigió que se amplíe la línea de préstamos reintegrables para dar salida a la vivienda en stock, una medida que finalizó el 31 de diciembre de 2010.
