Si los Reyes Magos, que sólo son tres, han sido capaces de dar su regalo a todas las niñas y todos los niños de España en una sola noche, ¿por qué no va a ser capaz el Betis de marcar dos goles en el campo del Getafe, eliminar a un Primera y clasificarse para los cuartos de final de la Copa del Rey? Cosas más raras se han visto, y si el Betis viajó ayer hasta Madrid fue con el objetivo de remontar el 1-2 de la ida. No sería la primera vez. El conjunto verdiblanco ya viene de echar de la Copa a otro Primera, el Zaragoza, igualmente después de perder primero (0-1) y ganar después. El 1-2 de La Romareda debe ser una referencia para el equipo de Pepe Mel como lo es para el de Míchel, ex compañero del míster verdiblanco en los lejanos años 80 en la cantera del Real Madrid y hoy contrincante.
El entrenador del Getafe no se fía del líder de Segunda, y hace bien. Su media de goles en la Liga es de más de dos por encuentro (2,3 para ser exactos), justo los que necesita para invalidar la ventaja azulona. El penalti transformado por Jorge Molina ya a última hora alimenta la esperanza de remontar en el bando verdiblanco, porque un 0-2 habría sido casi irrecuperable. La tarea, de todas formas, es complicada tirando a complicadísima. El Getafe no es un rival cualquiera: es séptimo en Primera, llevaba cuatro victorias consecutivas (y ocho partidos oficiales sin perder) antes de ser derrotado por el Madrid y practica un fútbol que pocos igualan en estos momentos en el balompié nacional. Tiene Míchel una filosofía semejante a la de Mel, así que si ambos apuestan por el ataque y el buen juego, por qué no va a soñar el Betis con la gesta.
Hay muy pocas bajas en ambos equipos, lo cual contribuye a predecir un choque brillante y atractivo. En el Betis, el único que se cae es Belenguer, que tenía muchas ganas de medirse al equipo donde jugó siete temporadas. Por el contrario, Mel puede contar con Salva Sevilla, Beñat y Fernando Vega, todos ellos renqueantes después de la victoria ante el Nástic. Es posible que los tres sean titulares, aunque la alineación es más incógnita que la verdadera identidad de los Reyes Magos. En el Getafe, Míchel sólo pierde a Pedro Ríos y Mario Álvarez, pero a cambio recupera a Adrián Colunga. El técnico azulón ha citado a los 22 jugadores disponibles.
El Betis se toma la eliminatoria con mucha filosofía. Si es eliminado, no pasa nada. La prioridad está clara y el papel en la Copa será positivo ocurra lo que ocurra hoy. "La salvación del club pasa por subir a Primera", recordó ayer Mel. Y si el Betis culmina la proeza, se dará a sí mismo el regalo de los regalos: un cruce contra todo un histórico y, por tanto, el taquillazo del año. Eso sí que sería algo así como el oro, el incienso y la mirra, todo en uno.
