El ex presidente del Gobierno Felipe González (PSOE) afirmó ayer que la solución a los problemas de liderazgo político de los estados pasa por profundizar en el "regionalismo abierto" y extrapolar a otras regiones del mundo instituciones como la Unión Europea (UE). En cambio, dar respuestas a los problemas internacionales desde el "unilateralismo" no logra abordar estas dificultades globales.
González abogó por "organizar relaciones de poder en el mundo en conjuntos" que agrupen a Estados según la región donde estén. Hizo este diagnóstico pese a afirmar que "nadie cree" a día de hoy en la UE y que "cada vez hay más desafección" respecto a la Europa de los 27. "Necesitamos más que nunca a la UE aunque nunca nadie crea en ella", dijo González.
Aseguró que lo contrapuesto al unilateralismo no es el multilateralismo, sino el "regionalismo abierto, grandes conjuntos de poder", que, en el caso de China, por sus dimensiones, puede englobar a un único Estado, pero en otros casos, como Europa, son agrupaciones "supranacionales" y supraestatales.
González hizo estas declaraciones durante una de sus intervenciones en unas jornadas sobre liderazgo político e intelectual organizadas por la escuela de negocios barcelonesa Esade en el monasterio de Sant Benet de Bages (Barcelona) en colaboración con Caixa Manresa, donde también aseguró que las administraciones estadounidenses de George Bush, Bill Clinton y la de la primera etapa de George W.
Bush no se caracterizaron por hacer una apuesta unilateral. El ex mandatario español indicó que el unilateralismo que hoy sí caracteriza la política exterior de ese país es consecuencia directa de los atentados islamistas del 11 de septiembre de 2001.
