El ministro e Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, afirmó ayer que el departamento que dirige no ha detectado retrasos mayores a la hora de trasladar los precios del petróleo a la gasolina y el gasóleo en los periodos en los que el crudo baja frente a las momentos en los que sube.
Durante su comparecencia ante la Comisión de Industria del Senado, el titular del ministerio del ramo reconoció que la gasolina y el gasóleo han bajado "con cierto retraso", pero puntualizó que estas demoras en la fijación de los precios también se producen cuando el barril de crudo se encarece.
Según explicó, es lógico que los carburantes no bajen en la misma cuantía que el petróleo, ya que se trata de un proceso en el que influyen varios elementos, como el tipo de cambio y los impuestos.
A modo de ejemplo, Sebastián señaló que con la revalorización del euro una caída de 50 dólares en el barril representa unos 20 euros.
Añadió que a todo esto se une el hecho de que los impuestos representan el 50 por ciento del precio de venta al público de la gasolina y el gasóleo, por lo cual los descensos influyen sólo sobre la mitad de lo que pagan los consumidores.
Tardan lo mismo . Miguel Sebastián aseguró, además, que Industria no ha detectado que las demoras a la hora de reflejar en los precios de venta al público las caídas del petróleo sean mayores que cuando el crudo sube.
Por otro lado, el ministro de Industria quiso aclarar que cuando dijo que existía margen para que los carburantes bajaran 10 céntimos, puso como premisas que se mantuviera el tipo de cambio y que el petróleo cotizase a unos 90 dólares por barril.
