La plaza de El Arenal se convirtió ayer, durante unas horas, en uno de los campos de refugiados de saharauis del Tinduf (Argelia). El proyecto "ocho provincias y una Jaima" demostró ayer cumplir su objetivo: que los alumnos que participan se estén concienciando de la situación del pueblo.
La vida y costumbres del pueblo saharaui se mostraron ayer en la Plaza del Arenal, adonde llegaron alumnos de institutos de Almería, en compañía de otros chicos del Sáhara de su misma edad, que están recorriendo las provincias de la comunidad autónoma enseñando las costumbres del desierto. Muchos jóvenes nazarenos vieron ayer cómo se hacía el henna, un maquillaje especial para los festejos que se ponen las mujeres saharauis. Los chicos se vistieron con el darraa, traje masculino del Sáhara y las chicas con la melfa, el vestido para mujeres. Los saharauis bromeaban cuando veían a los niños ponerse el traje: "Ya sois hombres y podéis tener familia", comentaban.
Desde la asociación de Amistad con el Pueblo Saharaui destacaron que uno de los objetivos, aparte del aprendizaje de la cultura y la historia, es que "también los chavales sean embajadores de la causa del Sahara, y de que se les dé su Estado". Y está surtiendo su efecto, porque muchos alumnos están muy concienciados con los saharauis, como cuenta Diego Peñalver, de 17 años, que dijo que "es muy interesante cómo se comportan teniendo en cuenta lo que han pasado. Hay un acuerdo de paz que Marruecos incumple y ellos no, los están matando y aun así no recurren a la violencia", con lo que demostró haber aprendido bien lo que enseñan en la actividad.
Esta impresión la comparte también su compañera de clase Dunia Elmaki, de 16 años, que participa en esta actividad pese a ser de Marruecos: "La sociedad marroquí sabe que esa tierra es suya. Pero el gobierno es el que los castiga y los oprime. Mi pueblo se inventó la historia para justificar que están allí, pero no es cierto", afirmó la niña, a la vez que explicaba la situación que se vive en Marruecos: "Nuestro rey (Mohamed VI) es muy duro y no permite que nadie le critique, si haces una broma sobre él te matan, por eso cuando maltrata a los saharauis nadie dice nada, porque le tienen miedo".
