El director del Ballet Nacional de España, José Antonio, presentó ayer el espectáculo SMS (Sevilla-Madrid-Sevilla), que se escenificará hoy y mañana a las 20.30 horas en el Teatro de la Maestranza. Fernando Romero, Juan José Amador y Juan Manuel Cañizares actuarán como invitados de excepción.
Estrenado en el Teatro de la Zarzuela en marzo de 2007, este espectáculo aún no había pasado por Sevilla, pero lo hace coincidiendo con el 30 aniversario del Ballet y con tres primeros espadas del flamenco al frente. Para José Antonio, se trata además de una inapelable "imagen de preparación del Ballet Nacional", así como "un trabajo riguroso, con un vocabulario muy rico, que me emociona prácticamente cada vez que la veo".
La propuesta consta de tres partes. La primera es Caprichos, una creación de Fernando Romero -"uno de los mejores coreógrafos actuales" al decir de José Antonio- sin hilo argumental; la segunda, Dualia, es una coreografía de Rojas y Rodríguez sobre la partitura de José Nieto; por último, Cambalache lleva la firma de Antonio Canales sobre la música de Livio Gianola y Diego Losada, "un recorrido mediterráneo donde se intercambian aromas y colores de otras culturas, y donde Antonio ha imprimido toda esa personalidad tan visceral que tiene", explicó el propio director del BNE.
Romero explicó que "es un orgullo volver a la tierra de donde uno ha salido presentando algo", y contó que Caprichos es un trabajo "en el que prima el baile, la música, el vestuario y las luces. No hay guión, es sólo la música la que nos trae y nos lleva. He intentado fantasear un poco con la forma de coreografiar, por ejemplo, una serrana. Es una propuesta muy física, como suelen ser las mías, pero también con mucho empeño en resaltar el baile en sí", agregó.
La parte musical, como indicó Cañizares, parte de tres piezas clave de tres guitarristas clásicos: la rondeña de Ramón Montoya, la farruca de Sabicas y la zambra de Niño Ricardo. "No ha sido nada fácil, primero por el respeto que me inspiran esas figuras, pero también porque primero se hizo la coreografía, y había que crear después la plataforma sonora sin perder la coherencia".
Por último, Amador, que interpreta en su parte del espectáculo cantes de siega, así como milongas y jotas de Madrid, ha participado activamente en la composición del espectáculo dando a todos estos palos un enfoque singular y novedoso.
José Antonio justificó la demora en presentar este trabajo en Sevilla por el hecho de que "hay muchos comensales y poca tarta, y hay que repartirla con el respeto y ecuanimidad que requiere el Ballet Nacional de España", aseveró.
Por otro lado, el director del BNE aprovechó para elevar una reivindicación y mostró su indignación por lo que considera "una ofensa para la danza en España", según dijo: "¿Por qué todos los teatros tienen orquesta estable, y en muchos casos coro, pero no plantilla propia de danza? Creo que se le hace un desprecio a este arte, que le ha dado mucha gloria a nuestro país y que ha abierto muchos horizontes".
"Duele que las compañías estén siempre mendigando fechas para actuar. Actualmente no tenemos aficionados, a lo sumo seguidores de algunas figuras, pero hay que crear afición. Algo debemos de estar haciendo mal todos para estar en esta situación", apostilló.
