Canal+ estrenará el próximo 25 de junio el programa Conversaciones secretas, un nuevo formato que estará conducido por el periodista y escritor Juan José Millás . Se trata de un formato que convierte al espectador en un espía de una entrevista de Juan José Millás a un personaje relevante de nuestra cultura.
La grabación se lleva a cabo en escenarios importantes de la vida y la carrera del entrevistado utilizando cámaras ocultas, lo que fomenta la intimidad y naturalidad del resultado. Joaquín Sabina , Ferrán Adriá o Carmen Maura son algunos de los personajes que conversarán secretamente con Millás.
El programa se inaugura con una Conversación secreta entre Millás y Sabina. El entorno del cantautor no podía ser otro que Madrid, sus barrios, los bares donde actuaba, donde escribía, los amigos que lo rodeaban... Toda una biografía de Sabina, que se dispone a contar a Millás y a todos esos admiradores que les sigan.
Millás queda con su invitado en la calle de Tabernillas, en Madrid, en el corazón de La Latina, el antiguo barrio de Joaquín Sabina. Aquí, el cantautor tuvo su primera casa alquilada sin ascensor, su primera y única mujer: Lucía, y su primer lugar profesional de ensayo. Joaquín le comenta a Millás que "no ha cambiado mucho el barrio desde entonces" y, agarrados del brazo, como un par de amigos que se reencuentran después de muchos años, ambos se encaminan hacia La Mandrágora.
Entre comentarios discretos que una de las cámaras instaladas en el camino es capaz de captar, Joaquín le confiesa a Millás que hace muchísimos años que no sabe nada de Lucía, y Millás aprovecha para preguntarle si siempre ha vivido con una mujer. Risas, complicidad y asentimiento Sabina responde: "siempre he vivido acompañado".
"Aquí fuimos todo lo felices que pudimos ser, tanto Krahe como yo", comenta el cantante en La Mandrágora. Precisamente en este lugar Sabina estrenó Calle melancolía, y le confiesa también a Millás que la canción "era demasiado maricona, sentimental... Y cuando la cantaba aprovechaba que no estuviera Krahe".
El paseo continúa por La Manuela, donde se hacían tertulias filosóficas; por lo que era Elígeme, la sala de conciertos de Sabina, en pleno corazón de Malasaña. Y de aquí, al templo del toreo. En la Plaza de toros de las Ventas, sentados en las gradas de Las Ventas como dos aficionados más, Joaquín le hace otras confesiones a Millás: "Poco antes del concierto yo lo que quiero es irme a mi casa..."
En La Mordida, comenta: "Esto antes se llamaba El Café y yo me quedaba a escribir por la noche", comenta Sabina, añadiendo "A mi me gustaba escribir en los bares". Fruto de esa afición y de su inspiración en El Café surgieron sus canciones Por el boulevar de los sueños rotos" y Más de cien mentiras.
