Iván Escalera, el juez que sustituyó durante su enfermedad a la instructora de los ERE, Mercedes Alaya, ha dicho a Efe que "no llevas los ERE, el caso de los ERE te lleva" pues se trata de una macrocausa que habría hundido cualquier Juzgado de España.
Sin embargo, el Juzgado de Instrucción 6 de Sevilla lleva cuatro macrocausas -la de los ERE, las dos de Mercasevilla y la dirigida contra Manuel Ruiz de Lopera en el Betis- y lo hace "con una naturalidad pasmosa" gracias a la "impresionante capacidad de trabajo" de su juez titular y de los funcionarios judiciales, ha dicho Escalera en una entrevista con la Agencia Efe.
Él lo atribuye a que son funcionarios "experimentados, capaces y dispuestos a trabajar, de lo mejor que he conocido", junto a una juez "con una capacidad de trabajo impresionante y muy resolutiva".
A punto de dejar atrás trece años de ejercicio como juez interino y dedicarse a la abogacía en temas laborales y penales, Escalera recuerda los cinco meses de 2012 que compartió con Alaya como juez de refuerzo y los cuatro meses en los que se ocupó en solitario del Juzgado cuando la magistrada tomó, en septiembre del 2012, una baja médica por fuertes cefaleas.
De Alaya, destaca que le resultó "muy cómodo trabajar con ella" porque deja libertad a sus compañeros y también agradece la "gran colaboración" de los dos fiscales Anticorrupción, ya que el caso de los ERE es tan absorbente que "apenas deja tiempo para los casos ordinarios del Juzgado".
A ello, une que la presión de llevar un caso tan mediático hace que "en lugar de correr, andes con pies de plomo".
Escalera ha pasado por todo tipo de Juzgados: de pueblo, de lo social, de lo penal y de instrucción, y ha conocido casi todos los casos polémicos vividos en Sevilla como el del pederasta Santiago del Valle, a quien condenó a un año de cárcel por abuso sexual años antes de que asesinase a la pequeña Mari Luz Cortés.
También tuvo que ejecutar en 2004, como juez de lo penal 4, la condena contra Juan Guerra por defraudar a la Agencia Tributaria 253.627 euros, y de nuevo en el año 2012 volvió a tenerlo en el juzgado de instrucción 6 por un presunto alzamiento de bienes que finalmente fue sobreseído.
Escalera compaginó su trabajo en el juzgado de los ERE con un máster en Derecho Autonómico Administrativo en el que está preparando un trabajo sobre la corrupción y el delito de malversación.
Su tesis central es que, en España, el sistema legal para estos delitos no profundiza lo suficiente en la recuperación del dinero público, a diferencia de otros países como Estados Unidos, donde "es más importante la recuperación que la sanción".
Padre de cuatro hijos y residente en su pueblo natal de Casariche (Sevilla), Escalera ha pronunciado varias conferencias ante universitarios en las que transmite la idea de que muchos de los derechos de que disfrutamos hoy en día "no con gratuitos sino que fueron ganados a pulso".
Ahora abandona la judicatura con la reforma del ministro Alberto Ruiz-Gallardón para eliminar los jueces interinos, que considera "incomprensible" porque va a retirar a 1.200 jueces "cuando más falta hacen" y "cuando se quieran dar cuenta, el daño estará hecho".
A partir de noviembre, Escalera trabajará en el despacho de Francisco José Gandullo, que también es cónsul de Panamá en Sevilla, y seguirá ayudando al Proyecto Hombre y a familias desahuciadas a través de la Asociación de Abogados Independientes de Sevilla (ADAIS).
