La Peña Torres Macarena de Sevilla ha programado para esta noche un recital de baile a cargo de la bailaora sevillana Pastora Galván, una de las mejores de su generación. Será a las 22.30 horas.
Esta joven bailaora tuvo la suerte de nacer en el seno de una familia de bailaores sevillanos. Aunque, curiosamente, algunos de los grandes genios del baile no nacieron en familias de artistas del flamenco. Pongamos como ejemplos a Antonio el Bailarín o Matilde Coral. Sin embargo, eso de recibir el primer beso de luz en el seno de una familia de artistas, algo que venden muy bien los gitanos, se considera una garantía.
En el caso de Pastora Galván es cierto que sus padres bailan y que uno de sus hermanos, el gran Israel Galván, es el genio del baile de este tiempo, el que marca la pauta.
Pastora, pues, conoce el baile desde que nació y es algo que expresa con la misma naturalidad con la que habla o anda. Sencillamente porque es un arte que practica desde niña y todo lo que se aprende en la infancia pasa a formar parte de nuestra manera de ser y de sentir. Es algo, por tanto, que marca nuestra personalidad.
Por eso, cuando hoy vemos a un niño de Jerez que baila por bulerías como si tuviera cincuenta años, es porque ya en la barriga de su madre sentía el compás. No porque sea un genio, porque no hay tantos genios como se dice. No ocurre lo mismo con esas otras bailaoras jóvenes que han empezado a bailar ahora, con las modas de las escuelas y los cursos. Son personas que deciden estudiar flamenco, como otras optan por estudiar Medicina o Filosofía y Letras. Lo hacen con la misma mentalidad y el mismo fin.
Esta noche, todos aquellos que decidan ir a la peña Torres Macarena, el templo sevillano del arte jondo, disfrutarán de una bailaora auténtica, de una representante de la escuela sevillana entendida muy a su manera, porque Pastora Galván es, sobre todo, una bailaora personal. Si pueden no se pierdan su actuación.
