La Feria del Libro de Sevilla (FLS) 2011, que se celebrará desde el jueves 19 de mayo y hasta el lunes 30 del mismo mes, es la primera edición que se va a ver afectada por la crisis en la propia organización con una reducción del presupuesto de algo más del 14%, es decir, los 350.000 euros aproximadamente con los que se contaba el pasado año, han pasado a ser 300.000.
Por este motivo, según ha explicado el director de la FLS, Javier López Yáñez , en una entrevista concedida a Europa Press, "sencillamente y como solución hay que intentar racionalizar los recursos, tomando como primera medida reducir el recinto de la feria a la plaza Nueva, pues la ubicación en la plaza de San Francisco supone costes añadidos", siendo esta modificación la primera novedad en la edición de este año.
No obstante, López ha expresado que "quieren mantener lo fundamental de la feria, un escaparate para la promoción del sector, una buena oferta cultural y el mantenimiento de las ventas", precisando que en momentos de crisis como los actuales la promoción es fundamental y la Feria del Libro es "un buen lugar para ello".
"Era más sensato dar cabido a los mismo expositores y no crecer, pudiendo obtener una reducción de costes en instalaciones, servicios, equipos auxiliares, megafonías y otros elementos". El número de expositores en 2010 fue de 70 , mientras este año se cuenta con 63. En cuanto a librerías y editoriales participantes, el pasado año participaron 29 y 23, respectivamente, siendo los mismos sellos los que acuden este año a la FLS y una librería menos, 28.
En cuanto a instituciones y organismos públicos, menos las consejerías de Educación y de Economía, Innovación y Ciencia, repiten las mismas, aunque reducen sus espacios, pues si en 2010 ocupaban cuatro casetas cada una, este año pasan a hacerlo en dos.
Javier López ha aclarado que el único motivo para no dar a entrada a nuevas librerías y editoriales -en referencia a la queja de algunos sellos por no poder participar en la Feria del Libro de Sevilla- es la reducción de espacio, al tiempo que concreta que hay criterios que pesan en esta decisión, según recoge el reglamento de la feria, apuntando uno de ellos, la asistencia a otras ediciones anteriores. "Las editoriales y librerías que han solicitado su participación no lo han hecho en años anteriores", según afirma.
No obstante, ha asegurado que "no se ha expulsado a nadie de la feria" y ha adelantado que cuando el modelo vuelva a crecer y contando con algunos criterios como la participación previa, el tipo de fondo, el volumen editorial o la agrupación de sellos, entre otros, darán cabida a nuevas editoriales y librerías.
En este sentido, el director de la cita editorial ha señalado que valoran el papel preferente del librero en la comercialización del libro porque es el papel que realizan todo el año. Además, apunta que las propuestas conjuntas de librerías y editoriales son "muy bien estudiadas, ya que supone un aumento de la oferta para los lectores".
Por otro lado López considera que la Feria del Libro de Sevilla es "la más importante a nivel nacional tras Madrid", y ha subrayado que en estos momentos se están replanteando en la península el esquema de estas celebraciones, reconociendo que otras provincias están tomando como modelo la cita de Sevilla. "Los modelos se están modernizando y adecuando a las nuevas formas de comunicar", expresa.
No obstante, a pesar de la reducción presupuestaria, López Yáñez ha indicado que se ha procurado mantener el nivel de actividades de años anteriores, considerando una apuesta ambiciosa la dedicatoria de esta edición al escritor luso José Saramago. En este sentido, ha adelantado que se están concretando la presencia de autores de prestigio para dar pie a un programa del mismo nivel que en 2010.
A juicio del director, "el modelo funciona", como así demuestran el mantenimiento del número de ventas y visitas. Además, ha apuntado otra circunstancia que refuerza el éxito del modelo, las solicitudes de librerías y editoriales para participar, ya sea con su caseta o en actividades, presentaciones de libros o promoción de autores. "Si dejáramos de recibir peticiones, comenzaríamos a preocuparnos", confiesa.
Por otro lado, López ha comentado que la preocupación de la Asociación Feria del Libro de Sevilla "no está en el crecimiento del número de casetas, sino en la oferta real que se realiza, ya que la principal vía de éxito es la calidad de los fondos de los expositores, apostando por la oferta especializada".
Desde la Asociación Feria del Libro de Sevilla siempre se ha presentado como un objetivo esencial en su desarrollo la internacionalización de la misma. López ha afirmado a este respecto que "no es un objetivo que se abandone, sino que tendrá el desarrollo relacionado con el presupuesto actual". Además, indica que el primer paso en este camino es la presencia de autores extranjeros y editores. "Durante los próximos dos o tres años será este aspecto en el que nos centremos", afirma.
Por último y en referencia al uso de las nuevas tecnologías en el desarrollo de la feria, López Yáñez ha explicado que mantendrán las herramientas usadas hasta el momento, blog, web, emisión en directo de actos o actualización de la programación, entre otros; "un modelo adecuado, pero costoso". Si bien, precisa que "están pendientes de encontrar una solución técnica que permita dar el mismo servicio aplicando la reducción de costes".
