Manolo Jiménez dispuso un once ante el Betis que ha levantado una polvareda que aún no se ha aplacado. El técnico aplicó para sorpresa de todos su propia teoría de las rotaciones en uno de los días más importantes de la temporada, una teoría cuyo cumplimiento se presupone esta semana.
Eligió el entrenador del Sevilla el primer derbi de la temporada para realizar sus primeras rotaciones, unas rotaciones que el pasado miércoles, a tenor de sus palabras, ni contemplaba dada la altura de temporada en la que nos encontramos. El cansancio tras el partido del jueves fue el motivo de tan controvertida alineación ante el Betis, con tres debutantes en la Liga esta temporada (Mosquera, Acosta y Escudé), con cuatro centrales en la defensa y con un doble pivote en la medular inédito hasta el momento.
El caso es que atendiendo a este patrón que ha puesto en marcha Jiménez y que se debe mantener -en caso contrario su argumentación perdería ya cualquier sentido- durante las próximas dos semanas (cuatro partidos ante Espanyol, Atlético, Salzburgo y Athletic) se prevé la misma política de cambios. Para el choque de mañana se esperan novedades en todas las líneas, para evitar ese desgaste que ha puesto Jiménez de manifiesto.
En la defensa, lógicamente dentro de la apuesta del técnico, volverían Konko, Squillaci y Fernando Navarro, mientras que David Prieto tiene todas las papeletas para mantenerse. La vuelta del lateral derecho francés obedece además a su recuperación -acabó el jueves pasado con fiebre, según Jiménez- y al nefasto resultado que dio la apuesta de Mosquera en el lateral derecho, por donde llegó casi todo el peligro verdiblanco.
En el centro del campo parece de perogrullo que Jesús Navas y Diego Capel volverán a las bandas y que Maresca y Fazio estarán en la medular, mientras, en ataque podría entrar Chevantón por la acumulación de partidos de Luis Fabiano y Kanouté.
¿y el domingo? La duda que se plantea por tanto es qué equipo saldrá el domingo ante el Atlético de Madrid, porque si Jiménez sigue su patrón apostará en Madrid por un once parecido al del derbi para evitar el cansancio de su plantilla tras cinco partidos oficiales en la temporada.
La cuestión es si el técnico del Arahal mantiene esta filosofía en un encuentro de tanta magnitud como el del Atlético. Si lo hizo en el derbi y mantiene su propia lógica, no debe tener problemas para hacerlo en el Vicente Calderón.
