La Guardia Civil deja de multar, pero no de vigilar, según informó ayer la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC ) que advirtió de que la llamada huelga de bolis caídos continua y que el "conflicto sigue". Esta situación, según la AUGC, ha provocado que se hayan interpuesto en los diez primeros días de agosto en las carreteras 20.000 denuncias menos que en el mismo periodo de 2009.
En un comunicado remitido a los medios, la AUGC insiste en que las "presiones" a las que dice "se ven sometidos los guardias civiles con el fin de que se aumente el número de denuncias", ha producido el efecto contrario, ya que en junio se redujeron en un 50% las sanciones impuestas respecto al año pasado. También, según los agentes, las multas se redujeron a la mitad en julio con respecto al mismo mes del año anterior, lo que pone de manifiesto que los agentes "se mantienen firmes e igual de desmotivados" que en junio, aunque siguen cumpliendo con su función en carretera de evitar accidentes y auxiliar al ciudadano.
De esta forma, y aunque "Pere Navarro -director general de Tráfico- lo ponga en duda", también se pueden alcanzar las cifras de siniestralidad que se han conseguido este pasado fin de semana, que se consideraba como el más peligroso del año y que se ha saldado con un 68% menos de víctimas mortales en carretera, remarcó la AUGC.
Pérdidas económicas. La asociación, que asegura que no ha convocado esta supuesta huelga, advierte además de que el número de multas, además de en la Agrupación de Tráfico, también se ha reducido en otras unidades como las de Seguridad Ciudadana. En base a los datos facilitados por la AUGC, el Gobierno ha podido dejar de recaudar al menos dos millones de euros. Este dato -calculado por este periódico- se obtiene de multiplicar las 20.000 denuncias que se han puesto de menos por 100 euros, que es la sanción mínima de tráfico que se impone por cometer una infracción leve. Esta cifra puede ser aún más elevada, teniendo en cuenta que por infracción grave se impone una multa de 200 euros y por muy grave 500 euros.
Un conductor puede ser multado por cometer una infracción leve cuando lleve menores de 12 años en el asiento delantero y sin los elementos de seguridad homologados, por utilizar el teléfono móvil mientras se está conduciendo, por circular con menores de 7 años en motocicletas y por parar más de dos minutos en pasos de cebra o zonas de uso exclusivo para minusválidos, entre otras infracciones.
Se considera infracción grave cuando se conduce de forma negligentes; se arrojan objetos que puedan producir accidentes o incendios; por incumplir las disposiciones legales sobre tiempos de descanso, límite de velocidad, prioridad de paso, adelantamientos, cambios de dirección y sentido, y circulación en sentido contrario; las paradas en lugares peligrosos y circular sin luces en situaciones de mala visibilidad también son infracciones graves.
Para ser multado con 500 euros hay que cometer una infracción muy grave como conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas, conducir de forma temeraria y hacer carreras de vehículos no autorizados, entre otras cuestiones.
Además la AUGC remarca que los agentes de los cuarteles, con competencias muy amplias para ejercer funciones de denuncia, como de caza, pesca, medioambiente o de tráfico "también han recibido amenazas" ya que, según critica, se han elaborado listas donde a los guardias menos multadores se les pretende retirar parte de su raquítico sueldo". Ante esta situación, la asociación exige a los responsables políticos de Interior que se sienten con las asociaciones para intentar resolver los problemas "con diálogo y negociación" porque las "presiones y amenazas (..) sólo agravarán el conflicto".
