La Consejería de Empleo ha concedido durante los últimos 10 años ayudas a una quincena de expedientes de regulación de empleo (ERE) cuyos pagos ya han sido liquidados -los llamados ERE muertos - y que cuentan con 693 trabajadores beneficiarios, cuyas pólizas se han cancelado.
Aunque es la jueza Alaya la que requiere al Gobierno andaluz que "aporte los informes que hubieran realizado sobre los ERE que no están en vigor", estos nuevos datos se han hecho públicos a través de una pregunta del PP en el Parlamento andaluz.
Los ha comunicado el consejero de Empleo, Manuel Recio, en una respuesta a los diputados del PP Antonio Sanz, José Loaiza y Jorge Ramos, que se interesaban por conocer "cuántos son los ERE que han recibido ayudas por parte de la Consejería de Empleo entre 2001 y 2010 que ya no están vivos y no son investigados", así como por saber "cuántos trabajadores procedentes de esos expedientes han sido beneficiarios de las ayudas y cuyas pólizas ya se han cancelado".
El mayor número de trabajadores beneficiarios se registra en el ERE muerto de Heineken España, con 223 empleados, seguido por Jerez Industrial S.A., con 116 y Yogures Andaluces SA, con 54. Frente a estos 15 ERE muertos, la investigación interna realizada por Empleo, y cuyo resultado envió al juzgado, se centró en los 64 ERE vivos cuyas prejubilaciones aún se están pagando (entre los que la Junta detectó 72 intrusos y 111 discordancias administrativas). La Junta siempre ha mantenido que no ampliaría la revisión a los llamados ERE muertos salvo que surgieran "indicios" de irregularidad.
