El Consejo de Gobierno ha aprobado hoy un acuerdo de "retención de crédito" para declarar no disponible con carácter preventivo un total de 2.696,8 millones del Presupuesto andaluz para 2012, que asciende a unos 32.000 millones y que se aprobó el pasado diciembre. La consejera de Hacienda, Carmen Martínez Aguayo, justificó ese recorte en las "disminuciones y aminoraciones" de los ingresos que la comunidad recibe desde los Prespuestos Generales del Estado y que no van a llegar a la comunidad autónoma.
El Gobierno de José Antonio Griñán, que actúa en funciones, no ha concretado por políticas o partidas a qué afectará ese importante recorte. La Junta alegó que aún le falta información de las reformas que prevé el Gobierno y que prevén, por ejemplo, menguar en 10.000 millones el gasto de las comunidades en sanidad y educación. La consejera de Hacienda dejó abiertos todos los escenarios. Esto es nuevo. Hasta ahora el Ejecutivo andaluz siempre había marcado como intocable el gasto en salud, educación y servicios sociales. Así además se ha pactado con IU, con quien el PSOE está negociando para formar gobierno en Andalucía.
"Será el futuro gobierno el que tomará las decisiones y concretará recortes en políticas", avisó Martínez Aguayo. Preguntada sobre si IU, posible ssoicos de Gobierno y reacios siempre a cumplir con déficit público estaba al tanto de estos recortes, la consejera de la Presidencia, Mar Moreno, aseguró que sí. "Es natural, la realidad presupuestaria y el impacto de los PGE en las cuentas autonómicas forma parte del diálogo abierto con IU", asumió.
La Junta además ha enviado al Ministerio de Hacienda la relación certificada de facturas pendientes de pago, conforme al acuerdo de pago a proveedores. Son 772.753 facturas impagadas que suman 2763,3 millones y afectan a 5107 proveedores. El 97% de estas facturas corresponden a gasto sanitario, detalló la consejera de Hacienda. Los proveedores pueden acceder a toda la información en la web de la Junta.
En plena bronca política con el Gobierno central, que lleva ya meses sembrando sospechas y dudas sobre la solvencia de las cuentas públicas y denunciando muchas facturas impagadas en los cajones, la Junta ha aflorado la que se supone que es toda la deuda pendiente con proveedores. El PP andaluz llegó a hablar de 4.000 millones impagados. Hacienda defendió una deuda mucho menor en relación al Presupuesto andaluz o por habitante que otras comunidades.
