No hay manera de levantar la moral al empresario y ello a pesar de que algunas de las medidas del Gobierno central, y en especial la reforma laboral que aprobó por decreto y con la bendición de las patronales, tratan de estimular la actividad productiva y, por tanto, la economía en general y el empleo. Así, seis de cada diez empresarios sevillanos consideran que sus negocios están yendo mal y cinco de cada diez creen que incluso irán a peor.
Se trata del primer indicador de Confianza Empresarial confeccionado por el Instituto de Estadística de Andalucía en colaboración con el Consejo Andaluz de Cámaras de Comercio. En concreto, el 60,10% de las empresas consultadas -la metodología habla de establecimientos, incluyéndose todo tipo de negocios- señalaron que les fue mal (evolución desfavorable) a lo largo del último trimestre de 2012, frente a tan sólo el 7,7% que dijeron haberles ido bien (favorable). Una diferencia brutal.
Ese pesimismo sevillano es superior a la media regional, que se saldó con un 58,97% de empresas admitiendo su negativa evolución, siendo el 6,98% el porcentaje arrojado para quiene manifestaron un ok -en este último caso, más bajo que para Sevilla-.
La cosa empeora al cotejar las expectativas del trimestre entrante, esto es, el primero de 2013. En efecto, en el sexto año de la crisis aún el 53,54% de los negocios de la provincia estiman que no remontarán, al contrario, su situación empeorará. Por tanto, están en línea con las previsiones oficiales de que la economía no levantará el vuelo hasta finales de este ejercicio, aunque la mayoría de las casas de análisis retrasan esa fecha hasta 2014, cuando también comenzará a generarse empleo.
Aunque ese último porcentaje, el 53,54%, es inferior al revelado en el cuatro trimestre de 2012, el aflorado entre quienes creen que mejorarán retrocede. Sólo el 6,57% se atreve a señalar que su negocio presentará una evolución favorable en el arranque de 2013.
Si nos vamos al promedio de la comunidad andaluza, el 56,93% de los empresarios pronostican una situación a peor, frente al 7,73% que hablan, en cambio, de una coyuntura más favorable para sus actividades.
De cara a lo que está por llegar, Huelva (47,13%) y Sevilla (el citado 53,54%) son, sin embargo, las provincias menos pesimistas, mientras que la negrura reina especialmente entre los empresarios de Málaga (63,64%) y Granada (58,7%). En cambio, si acudimos al tiempo pasado, es decir, al último trimestre de 2012, eran los malagueños (el 67,13%) y los sevillanos (60,1%) los que reconocían que la marcha del negocio no había sido precisamente próspera.
No hay datos desagregados por provincias para los sectores, sino que la estadística se limita al nivel autonómico. Así, las empresas más pesimistas respecto al negocio de los primeros tres meses de este año son las de construcción (el 70,59% dicen que irán a peor), las de transporte y hostelería (65,41%) y las de comercio (58,87%), mientras que las que menos, las procedentes de la industria (43,57%).
Y otros datos: son las pequeñas empresas de hasta 9 trabajadores las que ven más negro el horizonte de sus negocios, un 38,78% de las compañías andaluzas prevén una reducción de inversiones este trimestre, frente a sólo el 5,48% que las aumentará, y dos son los causantes principales de los males: la debilidad de la demansa (para el 76,48%) y la escasez de financiación bancaria (47,80%).
