Toda alegría era poca ayer en la barriada de Campoverde para celebrar los más de 13 millones de euros que el Cuponazo de la ONCE repartió entre numerosos vecinos del lugar. Y no es para menos, porque se trata del mayor premio repartido hasta ahora por la organización en Andalucía.
Muchos llegaron en la mañana del sábado a su comercio con cara de sueño. El día anterior se alargó hasta bien entrada la madrugada y la pequeña llovizna que a ratos cayó sobre Utrera se vio eclipsada por otra lluvia, de champán, con el que brindar y festejar esta fortuna.
La sorpresa llegó de la mano de Francisco Cuesta, el vendedor que repartió la suerte entre todos los afortunados. "Son trabajadores, una gran mayoría mujeres que me compran todos los viernes el cupón y ya nos conocemos, por lo que estoy muy feliz, como si me hubiera tocado a mí el Cuponazo", relató. No se llevó el premio gordo, pero sí un pellizquito. "Uno de los cupones, con 35.000 euros, que también me vienen muy bien, porque estoy de obras en casa", contó.
En la distancia -vive en Burguillos aunque acude a Utrera a diario- también él celebró con su familia la alegría que supone haber vendido 99 premios, entre ellos la serie agraciada con los nueve millones de euros del Cuponazo, las cinco series agraciadas con 150.000 euros y 93 premios de 35.000 euros cada uno. Todo en su quiosco ubicado en junto al centro de salud Utrera Sur, en la plaza de Pío XII, y en Campoverde, donde repartió la mayoría de los boletos.
No podrá olvidar el número de la suerte, el 73892, que repartió a las puertas de la panadería del barrio, y donde ayer todo era júbilo entre los agraciados con algún cupón. "Yo todavía no he podido felicitar a mis clientes, a los que veré el lunes", comentó el vendedor desde Burguillos.
Eso sí, probablemente no pueda felicitar a todos los premiados, ya que nadie sabe aún dónde se encuentra el ganador de los nueve millones de euros. Todo eran ayer rumores intentando identificar al poseedor del deseado cupón. La mayoría de las voces apuntaban a los propietarios de un conocido bar de la ciudad que, curiosamente, permanecía cerrado ayer, lo que alimentó todavía más las especulaciones en el municipio.
Los que se tienen que conformar con los 35.000 ó 150.000 euros, que tampoco les vendrán nada mal, hablaban del destino que tendría la cuantía. "Básicamente a pagar la hipoteca y tapar agujeros", aseguró Manuel, mientras que Francisco Javier mostraba el cupón que guarda en su vivienda: "Con las tres cerraduras de la puerta echadas, como solamente hago cuando me voy de viaje". Consolación, afónica "de la alegría" y embarazada de cinco meses, explicó: "En mi anterior embarazo también me tocaron 18.000 euros". Y no es la única reincidente porque Paco, con sus 73.000 euros de premio, también recordó que hace ocho años le tocaron "cinco millones de pesetas". Pero para regalo, el del carnicero del barrio, que se despertaba en el día de su cumpleaños con un buen puñado de euros de más en la cartera.
En definitiva, un premio que, sobre todo, está repartido entre gente del barrio, algunos jóvenes, como el caso de Alicia que, mientras seguía ayer peinando en su peluquería, no podía dejar de sonreír cuando contaba que se enteró de la noticia "mientras estaba jugando al pádel". Desde entonces, como ella, los agraciados lo celebraron por todo lo alto, porque los gritos de alegría y las bocinas de los coches anunciaron por doquier la fiesta que se estaba viviendo en Utrera.
Sin duda, un fin de semana de mayo que va a ser difícil de olvidar para estos vecinos del Bajo Guadalquivir después de ver caer desde el cielo cuatro gotas de lluvia y millones de euros.
