La portavoz del equipo de gobierno, Laura Ballesteros, manifestó que este cambio a sentido único sí permitirá desde ya "recuperar espacios para el peatón con la ampliación de acerados, la colocación de veladores, etcétera". Con arbolado y pérgolas se pretende adecuarla, como todo el centro, para el ocio. Entre otras cosas, las obras contemplan la colocación de paradas de taxis y autobús con la intención de acercar el transporte público lo máximo a las futuras calles peatonales.
Estas actuaciones tienen un plazo de siete meses, de manera que estarán terminadas en noviembre. "La peatonalización no se hará efectiva hasta no estar finalizado todo el Plan Centro, proyecto ejecutable en tres o cuatro, por lo que mientras tanto se podrá circular por el casco antiguo como hasta ahora", reiteró.
Por otra parte, recordó que el Plan Centro viene unido a un programa de aparcamientos alrededor de las futuras calles peatonales, contando en la actualidad con un total de 950 plazas, algunas libres y otras de uso rotatorio. Se trata de los aparcamientos de Sevillana, San Francisco, Perejil, MAS, Nicolás Alpériz y Auditorio. Éstos se completarán en el futuro con compromisos de nuevas bolsas de aparcamiento todavía pendientes de ejecutar. Precisamente, esta semana se presenta, en respuesta a la demanda de los vecinos y comerciantes del casco antiguo, un plan de señalización de aparcamientos a través del cual se dejarán bien claros las distintas entradas y accesos a todas áreas habilitadas para dejar el coche.
El Plan Centro apuesta por la peatonalización como fórmula principal para la revitalización social y comercial del casco antiguo. Se trata de un programa en el que se invertirán los próximos años 4,5 millones de euros. De todas maneras, la inversión va más allá, si se contabilizan otras partidas relacionadas con la regeneración del casco antiguo, como los 25 millones de euros que suman la construcción de la nueva plaza de abastos, las obras de infraestructuras como el tanque de tormenta y la ampliación del colector de las calles la Mina y Pepe Corzo, que pretenden evitar inundaciones en el centro, así como los planes de aparcamientos para el proyecto de peatonalización.
