Menú
Economía

La producción agraria rozó el año pasado los 2.000 millones en Sevilla

La Consejería de Agricultura publica los datos provincializados, con diferencias sustanciales respecto a los divulgados por Analistas Económicos. Los costes del campo de la provincia, con 850 millones, marcaron un récord por la presión al alza de la energía en un año en el que la renta aumentó un 24%.

el 24 nov 2014 / 11:30 h.

TAGS:

La Consejería de Agricultura y Pesca acaba de actualizar sus estadísticas macroeconómicas para las provincias andaluzas para el ejercicio 2013, que revelan para Sevilla 1.921,9 millones de euros como valor de la producción final agraria, indicador que mide cosechas y ganados comercializados en el mercado. Ese volumen, dado a conocer justo la misma semana en que Analistas Económicos de Andalucía presentaba su tradicional informe anual para el campo regional y cuyos datos varían sustancialmente respecto a los difundidos ahora por el departamento de Elena Víboras, implica un incremento del 15,2 por ciento sobre los contabilizados en 2012 y es la segunda cuantía más elevada de la última década. Una jornalera recoge melocotones en una finca próxima a la localidad de La Rinconada. / GREGORIO BARRERA Una jornalera recoge melocotones en una finca próxima a la localidad de La Rinconada. / GREGORIO BARRERA Los cambios metodológicos aplicados al computar las ayudas comunitarias –dos alteraciones desde que arrancara la pasada década, la última en 2006– impiden conocer a ciencia cierta si la de 2013 fue la segunda cosecha más importante para la agricultura sevillana –la primera sería la de 2007 con 1.945,50 millones de euros–. Eso sí, se queda nuevamente a las puertas de la barrera de los 2.000 millones. En valores constantes, esto es, teniendo en cuenta el impacto de la inflación y tomando 2005 como año de referencia, aquel indicador arroja 1.794,16 millones de euros, y aquí sí hay relevantes diferencias respecto a los años precedentes, al ser la segunda cifra más reducida desde 2007 –la menor: los 1.674,2 millones de 2012–. Y es que el índice oficial de precios –el IPC– ha ido retrocediendo en los últimos años de crisis económica hasta situarse bajo cero –un mismo euro no vale siempre igual, hay años que da para más que en otros, y aquí estriba la importancia de analizar en términos reales o constantes–. En términos corrientes –esto es, sin medir los efectos del IPC–, la rama agrícola cosechó 1.434,93 millones de euros, un 21,2 por ciento más, gracias al empuje de cereales, oleaginosas y cítricos, mientras que la producción ganadera se apuntó un valor estadístico de 432,45 millones, una cifra similar a la de 2012, a tenor de los cálculos de la Consejería de Agricultura. Los consumos intermedios –semillas, abonos, pesticidas, servicios veterinarios, etcétera– ascendieron a 850,89 millones, un 1,4 por ciento superior a los del ejercicio agrario previo, siendo la cifra más alta que consta en las series estadísticas. Un dato que, asimismo, avala la constante denuncia del incremento de costes –en especial, la energía– por parte de las organizaciones profesionales (Asaja, UPA y COAG). El valor añadido bruto –surge de restar los consumos intermedios al valor total de la producción– se ubicó en los 1.071,02 millones –siempre en euros corrientes–, un 29,17 por ciento más. Y si a esa cantidad quitamos las amortizaciones, agregamos subvenciones diversas y restamos los impuestos, fluye la renta agraria. Ésta  se situó en 1.268,01 millones, el 23,9 por ciento por encima de 2012. Con la inflación por delante, 1.369,5 millones, sólo un 9,7 por ciento más –en 2009, 2010 y 2011 se superó el listón de los 1.500 millones–. Las diferencias más relevantes de estas estadísticas actualizadas de la Consejería y las del informe del Servicio de Estudios de Unicaja radican en la producción final agraria –este último habla de 1.723,6 millones nominales– y en la renta agraria –1.108,2 millones–. Con las cuentas de la Junta sobre el tablero, la provincia sevillana supuso el año pasado el 19,55 por ciento del conjunto de la producción final agraria de Andalucía, que ascendió a 9.831,46 millones millones, y el 17,61 por ciento del indicador de la renta agraria –su traducción aproximada sería: el dinero que queda en manos del sector agroganadero–, cuyo volumen fue de 7.201,17 millones. Estos importes también son rebajados en el informe de Analistas Económicos de Andalucía. EN DETALLE Producción vegetal. Su valor fue de 1.434,93 millones de euros, con 252 millones para los cereales, 192,27 millones para las plantas industriales (incluye girasol, remolacha, etcétera), 20,63 millones para las plantas forrajeras, 226,52 millones para las hortalizas y plantones, 40,64 millones para las patatas, 533,80 millones para las frutas (aquí los volúmenes principales son para cítricos, con 184,18 millones, y aceituna de mesa, con 192,89 millones), 0,8 millones para vino y mosto, y 139,88 millones para aceite de oliva. Producción ganadera. El valor de la producción ganadera de la provincia de Sevilla se colocó en 432,45 millones de euros, siendo una aproximación sin que se especifiquen los datos por cabañas. Consumos. Los consumos intermedios, que equivaldrían a los costes de producción, ascendieron en 2013 a los 850,89 millones de euros, sin detalle del reparto, si bien el año pasado uno de los principales encarecimientos correspondería a la luz. Renta agraria. La renta agraria de Sevilla se situó en los 1.268,01 millones de euros corrientes, y en 1.369,55 millones en términos constantes. Almería. La provincia almeriense, la más agraria de Andalucía en volumen económico por su peso hortofrutícola, arrojó una producción final de 2.132,13 millones de euros, y una renta agraria de 1.695,05 millones. Rentabilidad. La renta agraria supuso en la provincia de Almería el 79,50 por ciento de la producción final de su campo y el 65,98 por ciento en Sevilla. La media andaluza: el 73,25 por ciento.

  • 1