Aunque ha hecho todo lo posible y sintiéndolo mucho, Morante no podrá estar presente en ninguno de sus tres compromisos el próximo fin de semana. Era la lacónica confirmación del apoderado de Morante, vía Twitter, saliendo al paso de todas las versiones que daban por hecha la presencia de su torero este mismo domingo en la plaza de Mérida para actuar mano a mano con Alejandro Talavante en el único festejo que iba a retransmitir Televisión Española este año.
Antonio Barrera dejaba así zanjada la incógnita más hermosa de una semana en la que se han apurado todos los plazos posibles para acelerar la vuelta de Morante a los ruedos. El propio torero, que pretendía estar listo para actuar este sábado en San Sebastián de los Reyes junto a El Juli y Manzanares, se había implicado de una manera personal en la retransmisión del festejo de Mérida, para el que todos los actores del espectáculo empresa, toreros y ganaderos- habían cedido sus derechos de imagen.
Mientras tanto, la trascendental encerrona en solitario con seis toros en la Goyesca de Ronda del sábado 7 de septiembre se dibuja ahora como la meta definitiva de la reaparición del artista cigarrero, obligado a salir de la escena un excelente momento profesional que le ha llevado a ser uno de los nombres imprescindibles de la campaña 2013.
Aunque la empresa de Mérida, comandada por el ganadero sevillano José María Garzón, no quería hablar de ningún plan B en caso de incomparecencia de Morante, fuentes cercanas a esta empresa ya han señalado que se barajan otros nombres para sustituirlo como del maestro valenciano Enrique Ponce, que está cuajando un gran mes de agosto, aunque también se han mencionado toreros como Manzanares, Ferrera ó Sebastián Castella.
El diestro de La Puebla resultó herido gravemente en Huesca el pasado 10 de agosto por el primer toro de su lote, un ejemplar de Gerardo Ortega al que toreaba a placer sobre la mano izquierda. En uno de los cites, el animal se venció por completo y le alcanzó en la ingle propinándole una brutal cornada que necesitó de tres horas de intervención en la enfermería de la plaza de Huesca. Después de ser trasladado a Zaragoza el torero necesito de dos transfusiones de sangre aunque su rápida evolución permitió trasladarlo a planta el pasado miércoles.
Según el parte oficial firmado por el doctor Vaca en la enfermería del coso oscense, Morante tuvo que ser intervenido de una cornada en el tercio medio cara interna del muslo izquierdo con tres trayectorias: la primera ascendente que diseca el fémur en la cara anterior asta trocante mayor de unos 30 centímetros; otra ascendente hacia arriba y hacia adentro hasta la región inguinal de 15 centímetros; y la tercera ascendente y hacia afuera y hasta la línea del fémur de otros 20 centímetros. Después de la operación realizada en la enfermería de la plaza fue ingresado en el hospital de San Jorge de Huesca antes de ser trasladado a la clínica Quirón de Zaragoza, que abandonó para trasladarse a la Puebla del Río para iniciar la rehabilitación.
