Menú
Local

La responsabilidad social como cultura y actitud irrenunciables

La Fundación Cobre Las Cruces, Vodafone Andalucía y la Fundación Cajasol abogan con decisión y firmeza por que las empresas brinden su apoyo a los emprendedores como fórmula para crear empleo y dar valor al entorno.

el 20 may 2013 / 23:06 h.

TAGS:

Francisco Galván interviene en presencia de Antonio Fernández, Elisabeth Sáenz y Juan Román. / J. M. Espino (Atese) Francisco Galván interviene en presencia de Antonio Fernández, Elisabeth Sáenz y Juan Román. / J. M. Espino (Atese) El emprendimiento y la RSE (responsabilidad social empresarial) fue el título de la mesa redonda que tuvo lugar a continuación de la pertinente pausa para el café, con la moderación de Elisabeth Sáenz, directora gerente del Instituto de Estudios Cajasol, y que contó con la visión de tres empresarios. El primero en tomar la palabra fue Juan Román, gerente de la Fundación Cobre Las Cruces (CLC), quien reflexionó acerca de la evolución de la cultura del emprendimiento, dibujando un panorama muy poco halagüeño en cuanto a empleabilidad tanto en lo público, “que aún tiene pendiente un ejercicio de adelgazamiento”, como en la empresa privada. De ahí que sostuviera que “el único ámbito en el que se puede generar empleo es por cuenta propia”. Román enumeró cuatro lastres que afectan a la empleabilidad de los jóvenes:la dispar formación profesional, el déficit en idiomas, la escasa movilidad y la falta de cultura emprendedora y empresarial, si bien también achacó al Estado el no haber favorecido esa actitud. El responsable de Cobre Las Cruces concluyó que la responsabilidad social de las empresas “es trabajar bien, estar bien organizadas y dar valor al entorno”, destacando que CLC aporta trabajo a más de un centenar de empresas contratistas, así como programas como los premios Cinco Nueves o el de desarrollo de municipios aledaños como Gerena, Guillena, Salteras y La Algaba. Antonio Fernández, director territorial de Vodafone para Andalucía y Extremadura, repasó algunas de las acciones de responsabilidad social que realiza la empresa de telecomunicaciones, caso de cursos de formación en el uso de las tecnologías para mayores o personas sin techo, desarrollo de servicios como la telemedicina, aplicaciones para el medio ambiente, mensajes solidarios y donación de servicios tecnológicos a ONG, etc. Además, hizo hincapié en un proyecto de asesoramiento a emprendedores por el que seleccionaron 17 ideas de las cuales 13 son hoy empresas constituidas, además del programa Emprende con Vodafone. Cerró el turno de palabra Francisco Galván, responsable de Voluntariado y Nuevos Proyectos de la Fundación Cajasol, quien definió la RSE como “una cultura, algo que se puede llevar a cabo y que no se debe olvidar”, ya que “ese compromiso es para mejorar la sociedad y propiciar un mercado mejor y mayores oportunidades”. Galván dijo que para la Fundación Cajasol se trata de “una actitud, un comportamiento voluntario que va más allá del cumplimiento de las normas que se nos aplican” y que “para que una empresa ponga en marcha estrategias de RSE lo primero es implantarlas en el interior, contagiar a los empleados”. En el difícil contexto actual, la obra social obliga “a reinventarnos y hacer las cosas de forma diferente”, concluyó.

  • 1