El Gobierno de Filipinas autorizó ayer que el ciudadano hispano-filipino Francisco Larrañaga pueda ser trasladado a España cuando lo solicite para cumplir su condena de cárcel por asesinato, después de que se le conmutara la pena de muerte por la de cadena perpetua en 2006.
El ministro español de Asuntos Exteriores, Miguel Ángel Moratinos, anunció ayer el inminente traslado de Larrañaga a España, tras permanecer 10 años en prisión, en una rueda de prensa en Manila junto con su homólogo filipino, Alberto Rómulo, en el marco de su visita oficial a Filipinas. "Ya está todo terminado y concluido. Su llegada a España es muy inmediata y sólo depende ya de que él mismo o su familia decida cómo y cuándo, y nosotros lo recibiremos y acogeremos", explicó Moratinos.
Francisco Larrañaga, tío del presidiario, expresó ayer que la familia se encuentra "muy ilusionada" y "emocionada" tras la autorización para que su sobrino sea trasladado a una cárcel española. Afirmó, en declaraciones a Efe, que la familia "siempre ha mantenido la ilusión de que Paco estuviera en España cuanto antes".
