El Sevilla tiene harto complicado alcanzar esta temporada la clasificación para la Liga de Campeones. Supondría, así pues, el segundo año consecutivo sin que la entidad alcanzara los importantes ingresos de la máxima competición continental. Estas cantidades, prioritarias para el objetivo estratégico del club, situarse entre los clubes más potentes de Europa con un presupuesto superior a los 100 millones, faltarán, por lo que el proyecto futuro del equipo nervionense variará.
Las consecuencias son económicas y deportivas. Para empezar, el presupuesto de la entidad se reducirá en un 25%, como ya ha aclarado Del Nido. De unos 100 a unos 75 millones de euros. Ese recorte, evidentemente, afectará al día a día y a la planificación de la dirección deportiva, que deberá tener en cuenta varios condicionantes para la próxima campaña.
Fichas pesadas. Para empezar, el Sevilla intentará liberarse de varias fichas millonarias de su plantilla. Son sueldos de Liga de Campeones para un equipo de UEFA que sólo pueden llevar a endeudar al club. Con Luis Fabiano se ha dado un primer paso. Con Konko ya se dio otro firme. En este perfil también se encuadran jugadores como Zokora y Dragutinovic, al que, salvo sorpresa, no se le renovará. Evidentemente, sí que habrá futbolistas que seguirán en esa elite económica, pero cuyo rendimiento está fuera de toda duda, como Kanouté o Jesús Navas.
Fichajes de coste medio. El perfil de los futuros refuerzos del Sevilla bajará en lo económico. El club nervionense no se puede permitir, por ejemplo, pagar 14 millones de euros por un delantero, algo que también ha dejado caer ya Del Nido. No habrá grandes inversiones por tanto, pero también es cierto que Monchi ha ofrecido espectaculares prestaciones cuando de encontrar buenos jugadores a buen precio se trata. Basten los ejemplos de Baptista, Adriano, Daniel Alves o por hablar de los actuales, Fazio y Perotti. Eso no quiere decir que no se vaya a fichar, sólo que no se hará por cifras estratosféricas como en las últimas campañas.
Margen para la cantera. Una pieza clave del proyecto de la próxima temporada será el entrenador, pero su perfil incluirá la confianza en la cantera. El club confía en que varios jugadores del filial con proyección puedan formar parte de la primera plantilla. Eso rebajaría la masa salarial y potenciaría, a medio plazo, uno de los grandes activos económicos del Sevilla en los últimos años, la venta de jugadores. La entidad, por tanto, pretender rebajar un par de escalones en su proyecto para retomarlo en una fase más embrionaria y asumible. Sin la Liga de Campeones, la necesidad económica obliga.
