Dirigidas particularmente a las pequeñas y medianas empresas (pymes) con la condición sine que non de que tengan sus centros de producción el algunos de estos pueblos, las subvenciones pueden llegar a suponer el 40% del proyecto. Tanto los nuevos emprendedores como lo ya establecidos pueden acceder a las ayudas, para las que se considerará el cumplimiento de la normativa vigente en materia de igualdad genérica, según explicaron sus promotores.
La modernización, el dinamismo, la generación de empleo y la diversificación de la economía rural (agrícola y ganadera), con importante peso todavía en estos municipios, son los objetivos de acción, aunque en todo caso no se cerrará a otros sectores que sumen al conjunto de la economía de las dos comarcas, en especial el turismo y los servicios. Esta filosofía obedece a la certeza comprobada de que la marca de calidad en proceso de gestación no sólo se configura en función de los productos que pone en el mercado, sino que se extiende a una suma de actores asentados en su geografía, que los revalorizan y ayudan a entender el contexto productivo, natural o cultural, y cuyas empresas serán también posibles beneficiarias.
Los siete consistorios cursarán a través de sus oficinas de desarrollo la tramitación, al igual que el Grupo de Desarrollo Comarcal desde sus centrales situadas en las ciudades de Carmona y Écija.
Como queda constatado por la experiencia de los gestores del Grupo de Desarrollo Comarcal, las marcas de calidad representan una garantía de penetración de los productos en los mercados. Es partiendo de tal premisa que esta marca de calidad se vislumbra por sus impulsores como una posibilidad adicional de generación de riqueza vinculada al agro. Prueba de ello fue la participación el pasado mes de mayo en Ciudad Real de tres empresas de Los Alcores en la feria de muestras España Original, que congrega las denominaciones de origen. Se trata de la visueña Huevos Francisco Zambrano y las carmonenses Aceitunas Losada y Los Alcores de Carmona.
Por otra parte, la oposición de la marca holandesa Netherland Campina a aceptar como la marca de calidad el sello Campiña-Los Alcores constituye por el momento un obstáculo imprevisto para el Grupo de Desarrollo Comarcal. Los holandeses justifican su postura en la generación de posible confusión por el parecido de ambos nombres. En realidad, el temor a la competencia puede subyacer tras su postura, que mediante gestiones burocráticas tratan de paliar los directivos del Grupo de Desarrollo Comarcal, que confiaron en que pueda ponerse a punto.