Las pugnas políticas impiden abrir la residencia de mayores en Almadén de la Plata

El centro se encuentra terminado, a la espera de que el Ayuntamiento solicite el enganche de la luz.

el 06 dic 2011 / 21:12 h.

Una de las habitaciones de la residencia de mayores de Almadén de la Plata ya terminadas y totalmente equipadas.

"Se hace daño a los vecinos y, además, están matando a una empresa que puede dar trabajo", denuncia públicamente Andrés Marín, presidente de la asociación de mayores Los Melojeros. "A falta de que el Ayuntamiento solicite la luz, está todo hecho, la residencia podría estar abierta ya", afirma Marín, que fue alcalde de Almadén de la Plata mucho tiempo atrás. "No entro en polémicas políticas, hay unas necesidades tremendas y no se puede castigar a los mayores". Marín cuenta que un vecino, con su mujer caída en el suelo, tuvo que esperar a que abriera un bar a primera hora de la mañana para pedir ayuda. "Hay personas que están en otras residencias lejanas, cuando podrían estar en su pueblo, con sus familiares".

El centro está terminado y equipado, bajo la teórica gestión de una empresa privada, pero acusaciones políticas y cuestiones jurídicas impiden su puesta en marcha. "Podía haber estado abierta, pero perdimos las elecciones", sostiene Julián Cabana (PSOE), exalcalde de Almadén. "Por una artimaña política de la oposición, se paralizó la apertura, a pesar de que las ordenanzas (una fiscal y otra de prestación de servicios) quedaron aprobadas en un Pleno el pasado 10 de marzo, después de las alegaciones que presentaron una concejala tránsfuga nuestra y el PP (ahora en la alcaldía)". Paralelamente a estos trámites, la adjudicación del centro fue ganada por una de las empresas que se presentó al concurso público y que ya ha realizado una inversión para acondicionar las instalaciones, según cuenta el propio Cabana.

José Luis Vidal (PP), el actual regidor, devuelve las críticas a su antecesor e indica que todo fue una "cacicada dictatorial y antidemocrática", puesto que el exalcalde del PSOE quedaba en minoría al irse un concejal de su grupo y recurrió a tres informes que no se ajustaban a derecho para aprobar las ordenanzas. "Pretendía inaugurarla antes de las elecciones, quitó el voto a los concejales para superar los trámites y privatizó la residencia", explica el alcalde. El equipo del PP recurrió entonces ante el tribunal contencioso-administrativo la celebración del Pleno mencionado, donde se adoptaron las citadas resoluciones. "Ya hay una sentencia que lo considera nulo", afirma Vidal. "Primero hay que legalizar esto y restituir el Pleno, después veremos cómo se lleva a cabo la gestión, puesto que no estamos de acuerdo con la privatización." Por el momento, el alcalde no concreta plazos ni apunta fechas determinadas para la apertura de la residencia, sólo se atiene a los términos y plazos que pudiera marcar el proceso administrativo abierto. "No depende solamente de nosotros; si así fuera, ya estaba abierta". Fuentes consultadas por este periódico del anterior equipo de gobierno de Cabana confían en que el geriátrico se ponga en marcha bajo las condiciones presentes, aunque el gobierno municipal revoque los acuerdos y cambie la gestión próximamente.

"Si hay algo ilegal, que lo denuncien, pero que se ponga en marcha ya la residencia", reclama Andrés Marín. El asunto está enquistado y la solución no parece cercana. Esta residencia es un centro de mayores concertado con la Junta de Andalucía, destinado a la atención de 49 personas internas, más otras 20 plazas contempladas para un Centro de Día. Se estima que podría dar empleo a 35 personas. En el año 2000 el gobierno municipal, entonces en manos del actual alcalde José Luis Vidal (PP), inició las obras de rehabilitación de las antiguas viviendas empleadas por los maestros en los años 60 y 70, sede actual de este centro. En la pasada legislatura, bajo el mandato del PSOE en el gobierno local, se terminaron las obras.

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