El final de la estación estival no ha dejado cifras muy alentadoras en los alojamientos extrahoteleros andaluces. El sector turístico se ha vuelto más exigente y ha dejado de lado a los campings, que han sumado un 13% menos de estancias y han nublado el balance de pernoctaciones fuera de los hoteles.
Los viajeros ya no se conforman con una ducha caliente y un trocito de suelo donde dormir y van, cada vez más, a lo cómodo. Al menos eso dejan claro los datos de pernoctaciones registrados durante el mes de septiembre, que revelan que los turistas han dado la espalda a los campings y ello ha provocado pérdidas en los alojamientos extrahoteleros, que contabilizaron durante el noveno mes del año un total de 194.459 viajeros y 963.421 pernoctaciones, lo que supone un descenso del 0,5% en los turistas alojados y un 3,3% menos de estancias en relación al mismo periodo del pasado 2006.
Sin embargo, los turistas han preferido la comodidad pero no el lujo (de grandes hoteles), ya que esta caída se debe a la bajada exclusiva de los campings, ya que, por contra, los apartamentos turísticos y viviendas rurales siguen haciendo buenos números y han vuelto a engordar su lista de visitas y pernoctaciones.
Los apartamentos turísticos fueron los alojamientos punteros dentro de la red extrahotelera. Sumaron un total de 97.966 viajeros alojados, un 12% más que en septiembre del ejercicio anterior (607.519 estancias), lo que supone un aumento del 1,5%.
Mientras, los campings andaluces fueron los peor parados y alcanzaron 82.594 turistas en sus instalaciones -un descenso del 13% respecto a septiembre del pasado año-, realizando 307.923 estancias, un 12,9% menos que en el mismo mes de 2006, según los datos difundidos el pasado miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por último, los establecimientos de turismo rural dieron alojamiento a 13.899 viajeros, un 8,5% más, e incrementaron sus pernoctaciones un 8,2%, con un total de 47.979 estancias.
A nivel nacional la historia se repite y los alojamientos extrahoteleros españoles también han visto decaer en septiembre sus pernoctaciones (10,1 millones) hasta un 3,8% respecto al mismo mes del año pasado. El descenso se produjo tanto en los residentes (-2,3%) como en los no residentes (-4,7%).
Donde sí mejora la cosa es en la estancia media de los turistas, que aumentó un 0,9% sobre las cifras del año 2006, situándose en un total de 6,1 pernoctaciones por viajero.
