Las decenas de miles de litros de aceite que se usan en el recinto ferial tendrán a partir de este año un nuevo uso: el Ayuntamiento ha adjudicado a una empresa, Selosa, el servicio de recogida de este producto para su posterior reciclaje como combustible biodiésel.
El año pasado, el Ayuntamiento ya cerró un convenio con la ONG Madre Coraje para la recogida de aceite usado de la Feria. Esta entidad lo empleaba para jabón, pero apenas tenía capacidad para recoger un 1% de lo consumido durante las fiestas de abril.
En este ejercicio, la Delegación de Medio Ambiente y la empresa municipal Lipasam han optado por adjudicar esta prestación a una empresa especializada, Selosa. Las 1.047 casetas instaladas en Los Remedios contarán con un bidón que se sustituirá por otro a medida que se llene.
La empresa filtrará y limpiará este aceite, que luego será remitido a una planta que lo transformará en biodiésel. De momento, este servicio se presta en Bilbao, donde son remitidos todos los litros de aceite recogidos en Andalucía con iniciativas como la que se pondrá en marcha la próxima semana en la Feria.
Este proyecto será un primer paso para Lipasam, la empresa dirigida por Rafael Pineda. Tiene como uno de sus principales proyectos para este año la contratación de un servicio de recogida de aceite permanente. En estos momentos, los técnicos buscan ubicaciones seguras donde se puedan instalar los recipientes de recogida, de forma que sean accesibles para el mayor número de ciudadanos posible.
El proyecto se pondrá en marcha en unos meses y poco a poco se ampliará para dar cobertura tanto a los vecinos como a los servicios de hostelería, que consumen la mayor parte del aceite que se gasta en la ciudad.
Un proyecto similar ejecutado en Granada permitió la recogida de 30.000 litros de aceite unos meses después de su puesta en marcha. Éstos son trasladados después a una planta de Bilbao, a la espera de que se ponga en marcha una planta similar prevista en la provincia de Sevilla.
La instalación de estos recipientes es una de las principales demandas que recibe Lipasam por parte de los ciudadanos, que carecen de dispositivos para la recogida de un producto muy contaminante que puede ser de gran utilidad por las posibilidades de transformación en biodiésel. De hecho, pese al coste de la recogida y depuración del aceite, la reutilización de este producto es rentable para las empresas.
