Los frailes capuchinos de Sevilla han decidido pasar a la acción para solventar los graves problemas económicos que tiene el convento. Debido a los pocos ingresos que tienen, han acordado con la empresa Garajes Capuchinos -constituida ex profeso por un particular- la cesión de la propiedad de los terrenos que hay en la trasera del convento, junto a las calles León XIII y Antonio Pantión. En ese suelo se construirán un parking subterráneo de tres plantas -con 166 plazas de garaje y 30 trasteros- y una hospedería de 78 habitaciones, que será similar a un hotel con la categoría de cuatro estrellas.
Con esta cesión de propiedad los frailes recibirán a cambio un canon mensual de 10.000 euros mientras duren las obras y de 15.000 euros (más IVA) cuando ya estén terminadas. Estas cantidades se revisarán anualmente según el Índice de Precios de Consumo (IPC). La permuta tiene una vigencia de 50 años y una vez finalizada, la propiedad tanto del aparcamiento como de la hospedería volverá a ser de los religiosos capuchinos.
Según Rafael Pozo, actual portavoz de los frailes y ecónomo provincial de la orden cuando se cerró el acuerdo hace tres años, el convento es actualmente "completamente deficitario" dado que deben sobrevivir con las colectas de las misas, las limosnas y con las pensiones de los ocho frailes que viven en las instalaciones de la ronda de Capuchinos. "En otras épocas había aquí 35 religiosos viviendo", señaló Pozo.
Según las cuentas de la orden, el convento necesita al menos 18.000 euros mensuales para poder subsistir, dado que la finca urbana dispone de 7.442 metros cuadrados de parcela y una superficie construida de 5.821 metros cuadrados. "Es muy costoso el mantenimiento, siempre hay reparaciones que hacer y no podemos". No obstante, para intentar paliar su maltrecha economía, los religiosos ya habilitaron las dependencias del antiguo seminario mayor para oficinas, alquiladas ahora a varias organizaciones benéficas.
18 meses de obras. Las obras tienen un presupuesto de siete millones de euros y dado que el inmueble está catalogado como Bien de Interés Cultural (BIC), ya recibieron el pasado mes de diciembre el visto bueno de la comisión de Patrimonio de la Junta de Andalucía y ahora sólo falta la licencia de obras de la Gerencia Municipal de Urbanismo. Nicolás Gutiérrez, socio de la empresa que ejecutará las obras, explicó que están ya a la espera de recibir el permiso del ayuntamiento, por lo que los trabajos comenzarán "en breve".
Sobre los mismos, Gutiérrez precisó que tendrán una duración aproximada de 18 meses y que, afortunadamente, ya hay reservas para la mitad de las plazas de aparcamiento. "Esta zona tiene pocos aparcamientos en superficie, por lo que vendrá bien a todo el barrio y seguramente se descongestione la zona de coches", apuntó Gutiérrez. Los aparcamientos tienen un precio de 37.000 euros más IVA, y de 41.000 euros si además se adquiere uno de los treinta trasteros disponibles.
Respecto a la hospedería, Gutiérrez apuntó que ya se está negociando con varias cadenas hoteleras para intentar lograr un acuerdo y cederles la gestión y explotación de las futuras instalaciones a cambio, también, de un canon mensual. Sobre esta hospedería, abundó que aunque no estará catalogada como hotel sí tendrá las mismas características que un local de cuatro estrellas.
