Las tensiones de los mercados se relajaron ayer sobre España tras unos días de turbulencias. El Tesoro Público colocó 3.372,45 millones en obligaciones, cerca del rango más alto del objetivo previsto que se situaba entre los 2.500 y los 3.500 millones de euros, según el Banco de España. Además, la demanda fue muy elevada y casi duplicó la cifra que finalmente se ha colocado, aunque los tipos volvieron a subir, tal y como ocurrió en la subasta del lunes.
En concreto, el Tesoro colocó 2.487,20 millones en obligaciones a diez años con un cupón del 5,50% y a un tipo marginal del 5,483% frente al 5,179% registrado en la última emisión de este tipo, que se celebró el 17 de marzo. Así, el tipo de interés repuntó en comparación al registrado en la subasta de marzo, pero no supera el máximo alcanzado este año (5,604%).
Por otro lado, el organismo dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda colocó 885,25 millones de euros en una subasta adicional de obligaciones, con un cupón del 4,80% y vencimiento a 31 de enero del año 2024. En este caso, el interés marginal se situó en el 5,695%.
Esta emisión era crucial tras el repunte del riesgo país de España y después del resultado obtenido en la subasta de letras a 12 y 18 meses del lunes, en la que el Tesoro colocó 4.659 millones con un coste notablemente superior y una demanda considerablemente más baja.
De hecho, la subasta del lunes rompió la racha de buenos resultados del Tesoro, que había cerrado con éxito las emisiones de 2011 pese a la caída de Portugal, el repunte de los precios del petróleo y las dudas de los mercados suscitadas por el mecanismo de rescate permanente y la subida de tipos de interés.
La subasta de obligaciones de ayer volvió a registrar tipos más elevados, aunque muestra cierta recuperación de la demanda.
De hecho, la prima de riesgo ofrecida a los inversores por los bonos españoles a diez años respecto a sus homólogos alemanes, que escaló hasta los 231 puntos básicos a comienzos de semana, se relajó hasta los 218 en el arranque del día.
La rebaja de Standard & Poor's de la perspectiva de rating de EEUU y los rumores sobre la posibilidad de una reestructuración de la deuda de Grecia están detrás de la subida de la prima de riesgo, que inevitablemente vuelve a arrojar sombras sobre la economía española.
También ayer el Tesoro portugués colocó 1.000 millones, el máximo de lo previsto, en sendas emisiones de bonos a tres y seis meses, en las que la demanda superó ampliamente la oferta, aunque con repunte del interés. Así, colocó 680 millones en bonos a tres meses al 4,046% frente al 3,40% de la anterior emisión realizada a finales del año pasado.
Esas buenas acogidas se reflejaron en el parqué madrileño, que cerró la sesión con una subida del 1,53%, la mayor en las últimas dos semanas, que situó al Íbex 35 en la cota de los 10.535,4 puntos.
