El mapa de urbanizaciones fantasma, con casas a las que no les falta el más mínimo detalle pero que a causa de la crisis no tienen comprador, se extiende por toda la provincia, aunque el grueso de viviendas desocupadas está en el área metropolitana, cerca de la capital hispalense. Las constructoras, en época de bonanza, se lanzaron a construir sin tener la más mínima sospecha de la tormenta que se avecinaba y ahora se encuentran con miles de casas sin vender o a medio terminar.
Este parque de viviendas vacías es el que ha animado a familias sin un techo bajo el que protegerse a ocupar de forma ilegal casas en varios municipios, al igual que ha sucedido en Sevilla en la Corrala de la Utopía -San Lázaro- y la Corrala de la Alegría -calle Feria-, aunque este último edificio ya ha sido desalojado.
Almensilla, San Juan de Aznalfarache, Bollullos de la Mitación, Camas y El Coronil son las localidades donde se tiene constancia de asaltos a viviendas. Sólo en Almensilla los ocupas de la urbanización Las Atarazanas fueron desalojados sin violencia por la Guardia Civil, tras la denuncia presentada por la propietaria de los inmuebles.
En el resto de los municipios, según informaron los respectivos consistorios, las viviendas siguen habitadas ilegalmente. El Ayuntamiento de Camas manifestó que, según la información que le ha llegado, las familias que se asentaron en un bloque de pisos de La Pañoleta han llegado a un acuerdo con la propietaria del inmueble para seguir viviendo en esos pisos de la calle Saladilla.
En las otras promociones ocupadas de la provincia los ocupas siguen viviendo de forma irregular y en algunos casos están causando quebraderos de cabeza a los ayuntamientos afectados, que incluso han tenido que aumentar las medidas de seguridad en esa zonas.
En estas circunstancias se encuentran Bollullos de la Mitación y San Juan de Aznalfarache. En la primera localidad, su concejal de Seguridad Ciudadana, Antonio Naranjo (PP), se quejó de la pasividad de los promotores de las casas ocupadas, el grupo Catsu SL y Servihabitat, por no actuar, lo que ha obligado al Ayuntamiento a sellar alguna de las casas de esas urbanizaciones para evitar el efecto llamada, y a solicitar a Endesa y Aljarafesa que corten los suministros de luz y agua a las familias que están enganchadas de forma ilegal.
En San Juan de Aznalfarache la ocupación se realizó a principios del verano en una promoción de viviendas del paseo de Las Moreras. En esta zona, según explicaron fuentes municipales, el Ayuntamiento ha tenido que reforzar la vigilancia policial para evitar problemas ante la petición formulada por la asociación de vecinos.
Por último, ya fuera del área metropolitana, en El Coronil están ocupadas entre 10 y 15 casas que se encuentran junto al recinto ferial. Es una promoción de viviendas de renta libre, que cerró y que se encuentra en concurso de acreedores, según informó el alcalde, Jerónimo Guerrero (PSOE). Estas familias, todas de la localidad, son personas que necesitan una vivienda, indicó el regidor, quien aseguró que son vecinos que no causan problemas. Guerrero manifestó que la promotora de las casas ocupadas adeuda al Consistorio unos 150.000 euros, un dinero que se quiere emplear en adquirir el máximo de estas casas para ponerlas en alquiler, con un precio razonable.
