Los Palacios y Villafranca cuenta con un eslogan refrescante desde los albores de la nueva democracia: un pueblo joven. Hoy día, cuando pervive como el segundo municipio de entre 20.000 y 50.000 habitantes con más natalidad del país, debería llamarse el pueblo de los bebés. La guardería municipal que abrió hace cuatro años acaba de ser ampliada con 100 plazas más. El mes que viene abrirá otra guardería municipal en el municipio.
Basta con dar un paseo por Los Palacios y Villafranca (un municipio de más de 35.000 habitantes según el último censo), preferentemente por el centro a la caída de la tarde, para advertir que aquí hay más niños de lo habitual, como si los regalaran. Hasta ayer, según datos facilitados por el Ayuntamiento de Los Palacios y Villafranca, había 1.424 niños sólo de entre 0 y 3 años. Probablemente hoy habrá una docena más.
No en vano se tuvo que ampliar a contrarreloj una guardería municipal que abrió sus puertas en 2006 y que entonces contaba con 140 plazas. Tan sólo un año después hubo que habilitar salas para 32 niños más, y hace dos semanas, para otros 100, con lo que la guardería La Nana, que así se llama, cuenta hoy con 272 plazas, convirtiéndose en una de las más grandes de Andalucía. Tiene, prácticamente, dimensiones de colegio, aunque éste es solamente para bebés.
Para esta última ampliación fue preciso invertir, a cargo del Fondo Estatal de Inversión Local (FEIL), 135.000 euros en una superficie de 350 metros cuadrados que se suman a los 1.000 anteriores. Los casi tres centenares de bebés de La Nana son asistidos por un personal exclusivamente femenino: 18 maestras, con las que trabajan una pedagoga, una administrativa, dos celadoras, tres cocineras y cuatro limpiadoras, además de la directora, Pilar Benedito. Ésta lo tiene claro, ya que asegura que es “la guardería pública concertada más grande de la provincia de Sevilla”. Y es que 272 niños son muchos niños (y la lista de espera roza el centenar). Se nota, sobre todo, cuando al mediodía acuden los padres o los abuelos para recogerlos. Y eso que la inmensa mayoría los dejan en el comedor, hasta las 17.00 horas, que es la hora de su cierre.
Por otro lado, dada la elevada demanda, a finales de este mes abrirá sus puertas para acoger a 140 niños, también de entre 0 y 3 años, la segunda guardería municipal, la que lleva el poético nombre de La Luna del Horcajo. En estas instalaciones, según la información facilitada por el Ayuntamiento de Los Palacios y Villafranca, trabajarán 10 maestras. Pero también hay y seguirá habiendo lista de espera.
El millar de bebés que no están en estas dos guarderías municipales se reparten entre la única privada concertada del pueblo, Cosquillitas, y las varias decenas de guarderías privadas que existen por doquier. En cualquier caso, la directora de La Nana señala que los padres prefieren las guarderías municipales por “la amplitud de horario” (de 7.30 a 17.00 horas, con comedor incluido). También destaca “la profesionalidad” de su personal y “las buenas condiciones e infraestructuras de un edificio tan grandísimo”. Los padres a los que pregunta este periódico un día de la pasada semana a la salida de clase, corroboran estas razones, a pesar “de que es más cara”, como puntualiza una de las madres que paga 139 euros mensuales, el 50% de lo que cuesta la plaza, pues la otra mitad está subvencionada por tratarse de una guardería municipal concertada.
El alcalde, Antonio Maestre (PSOE), orgulloso de las ampliaciones pero consciente de la demanda, reconoce la necesidad de crear más plazas todavía. “El municipio cuenta con casi 2.000 niños menores de 3 años, lo que nos exige dotarnos de una red de centros escolares suficiente y ofrecer una escolarización de calidad desde la primera edad”, subraya el mandatario.
Una plaza en las guarderías municipales de Los Palacios y Villafranca, con comedor incluido, cuesta mensualmente 278 euros. Pero se cuentan con los dedos de las manos los padres que tienen que hacer frente a la totalidad de este importe. El 60% cuenta con una subvención de la Junta de Andalucía que les financia el 100% del coste de la escolarización. Del 40% restante, hay padres que pagan el 25%, el 50% o el 75%, según el nivel de ingresos de la familia, entre otras cuestiones que se tienen en cuenta. Todo hasta el punto de que “el 93% de los niños aquí matriculados tienen algún tipo de bonificación”, en palabras de la directora de La Nana.
