Local

Los sindicatos advierten a la Junta de que "esto no acabará el día 29"

Pastrana y Carbonero mostraros un disposición al diálogo frente al "desprecio a la negociación colectiva" pero a condición de que se anule la política de decretos y no se recorten derechos a los trabajadores.

el 22 sep 2010 / 11:52 h.

TAGS:

Por segundo día consecutivo, hubo pitos en San Telmo.

Si ayer fue el turno de los trabajadores del metal, hoy la concentración de empleados públicos convocada por UGT y CCOO ante San Telmo en el marco de los preparativos de la huelga general tuvo a la Junta como destinatario directo de los discursos. Los sindicatos lanzaron al presidente andaluz, José Antonio Griñán, un mensaje claro: que las movilizaciones en la administración no pararán si no echa para atrás su decreto de reorganización del sector público, "o desorganización", como ironizó el líder de CCOO, Francisco Carbonero.

Entre advertencias contra la "maquinaria" de privatización de los servicios públicos -"que son los que garantizan la igualdad, no basta con crear un Ministerio o una Consejería de Igualdad" recordó Carbonero- y mensajes de defensa contra que se "denigre diariamente" a los funcionarios", en palabras del secretario general de UGT, Manuel Pastrana, los sindicatos advirtieron a la Junta de que "rectificar es de sabios" y de que si no lo hace "esto no acabará el día 29".

Pastrana y Carbonero mostraros un disposición al diálogo frente al "desprecio a la negociación colectiva" pero a condición de que se anule la política de decretos y no se recorten derechos a los trabajadores.

Los líderes sindicales también emplearon sus alegatos en reforzar la confianza en la fortaleza de UGT y CCOO para frenar "políticas nefastas" y en que las huelgas generales siempre han servido para ello.

"No permitáis que las organizaciones a las que pertenecéis estén tiradas por los suelos, si los trabajadores perdemos la capacidad de organización y movilización es el fin", dijo Pastrana a los delegados sindicales congregados. "Nos querrán desprestigiar, ahora ser sindicalista es lo peor, pues no vamos a renunciar a ninguno de los derechos que tenemos reconocidos en la Constitución, porque nadie ha luchado como nosotros por las conquistas sociales, eso son políticas progresistas", añadió Carbonero.

Como auguró Pastrana en su discurso -"ahora dirán que la plaza no estaba llena"-, organización y Policía ofrecieron la habitual guerra de cifras en estos casos, 10.000 según los sindicatos, 3.000 según la Policía. Y entre quienes pasaban por allí, los hubo que indiferentes sólo se preocupaban por saber dónde paraba el autobús y quienes animaban a los sindicalistas al grito de "aupa, a ver si conseguimos algo".

  • 1