Una de las variaciones previstas dentro del club de cara a la actual temporada terminó en los juzgados por desacuerdo con los perjudicados. Se trata de la reubicación de los 41 socios que desde hace varios años ocupaban los asientos en la zona del antepalco del estadio Benito Villamarín. Desde el Betis se les comunicó la determinación adoptada por el consejo con la idea de sacar mayor rentabilidad a esa zona privilegiada del recinto heliopolitano.
En principio el argumento ofrecido en su momento se centraba en dos motivos fundamentales: la reestructuración de la zona mediante unas obras, así como la cesión de ese espacio para los patrocinadores del club, con quienes se aprovecharía cada jornada de partido para profundizar en negociaciones por el beneficio económico del club. Pues bien, la explicación no convenció a estos socios, entre los que se encuentran varios ex consejeros de la época de Lopera.
Manolo Castaño, Rufino González, Ángel Martín, Jaime Raynaud o Balbino de Bernardo, enre otros, presentaron una denuncia en el juzgado de instrucción de Sevilla, solicitando unas medidas cautelares con las que evitar al menos de momento que la idea del club se pudiera llevar a cabo. Hace unos días las partes tuvieran respuesta por parte del juez, en la que se rechazaba la petición de este grupo de socios de forma tajante, mediante un auto que no dejó lugar a dudas. De momento los demandantes no han tomado una decisión sobre si recurir esta decisión ante una instancia superior, aunque su intención no es la de quedarse de brazos cruzados.
En principio están estudiando esa posibilidad, porque mantienen que los dos argumentos ofrecidos por parte del club no se han cumplido. Ni se han llevado a cabo las anunciadas obras en el antepalco del estadio, ni tampoco los asientos están siendo ocupados por patrocinadores. Según su versión, el Betis tiene a su disposición noventa asientos en la zona preferencial del recinto, y no sólo se sienten privados de su lugar junto al palco presidencial, sino que además han sido reubicados en zonas poco acordes a sus números de carnet.
